Ciudad de México. El cabotaje es una "puerta falsa que se nos va a cerrar en la cara en unos años", no resuelve los temas de fondo que arrastra la industria aeronáutica en el país, y sólo afecta de "manera drástica y directa" la fuente de trabajo de 1.4 millones de mexicanos, denunciaron un conjunto de asociaciones agrupadas en el Frente por la Defensa de la Aviación Nacional (FDAN).
En conferencia de prensa representantes de 11 organizaciones recalcaron que buscan "a toda costa" una política de cielos abierto en el país. Primero esperan que el Ejecutivo modifique la propuesta que envió al Congreso, si no es así, buscarán "sensibilizar" a legisladores sobre el tema para no aprobar la iniciativa, pero, de no obtener respuesta, llevarán el tema a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, aseguraron.
Al cierre del año pasado, el Ejecutivo envió una propuesta de modificación a las leyes de Aeropuertos y de Aviación Civil, entre los cambios se incluye el cabotaje —el que una aerolínea extranjera vuele de un punto a otro dentro del país—, pero acotado a que “la ruta sea de interés estratégico para el desarrollo de la infraestructura aeroportuaria del Estado mexicano”.
Los representantes de tres colegios, cuatro sindicatos y otros organismos de profesionales aeronáuticos aseguraron que no están en contra de toda las modificaciones, sólo contra el cabotaje, y no abogan por las aerolíneas, sino por sus fuentes de trabajo y por extensión de una industria que equivale a 3.5 por ciento del producto interno bruto (PIB).
Subrayaron que no son un frente en contra el jefe del Ejecutivo, Andrés Manuel López Obrador. "Al Presidente no le han dado toda la información (...) lo están mal asesorando. No le han dicho las consecuencias catastróficas de lo que pasó. Yo me imagino que eso mismo le pasó a Antonio López de Santa Ana", dijo Humberto Gual Ángeles, secretario general de la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores de México (ASPA).
Ángel Domínguez Catzin, piloto aviador, presidente del Colegio de Pilotos Aviadores y del FDAN, reiteró que “bajo ninguna circunstancia" se permitirá que "se regalen o vendan los cielos mexicanos a intereses extranjeros y las modificaciones sin sustento técnico a nuestro marco legal, que pongan en riesgo el futuro de la industria, nuestro desarrollo profesional y fuentes de empleo”.
Desde el año pasado, cuando la iniciativa fue enviada, el subsecretario de Transportes, Rogelio Jiménez Pons, reconoció que el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) requiere apoyo para consolidarse y de ahí que se busca tenga una política de cielos abiertos, sobre lo cual ya se había hablado con aerolíneas de Europa y algunas de bajo costo de Estados Unidos.
Francisco Gómez Ortigoza, representante del Colegio de Pilotos Aviadores de México (CPAM), negó que la medida de cabotaje ayude al AIFA, siendo que "la gran piedra" para que las operaciones en la instalación despeguen es la pérdida de la Categoría 1 de la Agencia Federal de Aviación Civil por parte de la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos.