Ciudad de México. La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) emitió dos recomendaciones al director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo; la primera por el fallecimiento de una persona adulta mayor con problemas renales a quien no se le proporcionó oportunamente el tratamiento médico que requería en el Hospital General de Zona número 1 (HGZ-1) de la Ciudad de México, y la segunda por inadeucada atención médica en el Hospital General de Subzona y Medicina Familiar número 4 (HGSZyMF-4) en Tecomán, Colima.

En la Recomendación 221/2022, indicó que inició la investigación del caso de una persona de 78 años internada en el HGZ-1, quien requería una intervención de traqueotomía urgente, misma que no se había realizado, según el propio instituto, porque no había quirófano ni personal médico disponible.

En atención a ello, personal de la CNDH entabló comunicación con dicha dependencia para solucionar la petición y el IMSS respondió que el paciente se encontraba estable y que, de acuerdo con la valoración de la cirugía, esta no se requería con urgencia.

Posteriormente, el 4 de enero de 2022, la persona quejosa informó que la víctima había sido intervenida quirúrgicamente el 31 de diciembre, pero que su estado de salud se había reportado como grave, siendo necesario inducirlo a coma, ya que había adquirido una bacteria intrahospitalaria. Después, el IMSS señaló que el paciente había fallecido el 6 de enero por complicaciones propias de su enfermedad.

El análisis de las evidencias permitió documentar que el personal de salud del HGZ-1 vulneró los derechos humanos a la protección de la salud y al derecho de acceso a la información en materia de salud.

En tanto, en la Recomendación 217/2022, la CNDH indicó que el 21 de septiembre de 2019, la víctima de 18 años acudió al Servicio de Urgencias del HGSZyMF-4, ya que presentaba intenso dolor abdominal, referido por paramédicos de la Cruz Roja que atemperaron la afección. El personal médico le diagnosticó gastritis y que no era de gravedad la inflamación en el estómago, por lo que lo medicaron y enviaron a su casa para continuar con el tratamiento.

No obstante, en la madrugada del 22 de septiembre, la víctima regresó a Urgencias, donde insistieron en el cuadro de gastritis, ordenaron una placa de rayos X y aparentemente todo se veía normal. Sin embargo, un médico tratante sugirió la necesidad de hacer una cirugía y pidió al familiar esperar al especialista.

“Transcurrieron las horas sin que llegara ningún cirujano y persistía el dolor de la víctima. A las 7 de la mañana, una familiar solicitó información de su paciente y observó que lo trasladaban de una habitación a otra, sin comentarle nada. Más tarde, una persona integrante del personal médico le comunicó que ‘no se pudo hacer más por su familiar, que había fallecido’. En el certificado médico se estableció como causa del deceso choque séptico y abdomen agudo por apendicitis”, expuso.

En ambas recomendaciones, la CNDH solicitó al director general del IMSS reparar integralmente el daño causado, colaborar en la presentación de la denuncia administrativa que la Comisión Nacional presente ante el Órgano Interno de Control en el instituto contra las personas servidoras públicas responsables, y gestionar la impartición de cursos de capacitación en materia de derechos humanos.

Por su parte, el IMSS informó anoche que recibió ambas recomendaciones y cooperará con los propósitos de la CNDH.

Señaló que se encuentra dentro del plazo que establece la ley para analizar los documentos relativos a las dos quejas.