Ciudad de México. La organización Taxistas Unidos por México (TUM) solicitó la intervención de la jefa de Gobierno ante el aumento del delito de extorsión del que son objeto los conductores de este servicio en diversos puntos de las alcaldías Iztapalapa, Tlalpan, Tláhuac, Álvaro Obregón y Gustavo A. Madero.
“Llegan directamente con los encargados de bases ( checadores) y vía telefónica a a las bases de taxis exigiendo una cuota semanal diciendo que ellos son dueños de las zonas y por eso se les tiene que pagar”, señaló Jesús Maqueda y Gustavo Ramírez, voceros de la organización.
Desde el pasado 7 de noviembre las organizaciones agremiados a la TUM denunciaron el acoso que “venimos sufriendo por parte de distintos grupos delincuenciales, cobros de piso y todo tipo de extorsiones; que nuestros dirigentes estaban siendo amenazados de muerte por negarse a pagar y ser extorsionados”.
Indicó que desde esa fecha solicitaron a la Secretaria General de Gobierno, coordinar acciones de las distintas áreas del gobierno con las organizaciones ciudadanas para buscar, “garantías de seguridad de trabajo a nuestras compañeras y compañeros”.
En ese sentido demandaron que las autoridades reciban a una comisión para “exponer la problemática que en materia de seguridad tenemos los trabajadores del volante”.
Agregaron, “Qué más podemos hacer los ciudadanos, si venimos a pedir atención a los encargados de salvaguardar la integridad y la vida de los hombres y mujeres de la capital? ¿Necesitamos conformar policías comunitarias? ¿Son necesarias las autodefensas civiles o los grupos de vigilantes para defender nuestras fuentes de trabajo, nuestros hogares y nuestras vidas?”