Madrid. Miles de personas se concentraron y se manifestaron en hasta 17 ciudades españolas para exigir al gobierno, presidido por el socialista Pedro Sánchez, que apruebe cuanto antes y sin enmiendas la ley que regula los derechos del colectivo de los transexuales, en la que se prevé por primera vez la libre autodeterminación de género a partir de los 14 años. A la protesta en Madrid acudieron destacados miembros del gobierno, como Ángela Rodríguez Pam, secretaria de Estado de Igualdad y que es la mano derecha de la ministra del ramo, Irene Montero, la impulsora de la legislación.
En el seno del movimiento feminista español se está agudizando la ruptura, sobre todo a raíz de las discrepancias persistentes en la llamada “ley trans”, que para unas supondrá el reconocimiento total de los derechos para este colectivo, y para otras representará una amenaza a la lucha histórica del movimiento femenista a favor de los derechos de las mujeres. En el seno del gobierno también hay discrepancias, y muy profundas, que están todavía sin limar y que provocaron que uno de los grupos parlamentarios en el gobierno, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) decidió a última hora presentar una serie de enmiendas a la ley en tramitación, lo que además de retrasar su aprobación también podría provocar una serie de modificaciones que cambiarán el espíritu original del texto.
Numerosas organización del colectivo LGTBI convocaron a concentraciones y marchas en 17 ciudades de hasta 11 comunidades autónomas españolas, con el objetivo de exigir al gobierno que se apruebe la ley sin enmiendas, tal y como se había acordado en un primer momento. La manifestación más numerosa se registró en Madrid, a la que acudieron 600 personas, según la Delegación del gobierno, y más de cinco mil, según la plataforma convocante. En cualquier caso la marcha recorrió el centro de Madrid gritando proclamas y consignas contra el PSOE, en concreto contra la diputada y ex vicepresidenta del gobierno Carmen Calvo, a la que señalan como la principal instigadora para bloquear la tramitación de la ley.
Rodríguez Pam acudió a la marcha y en su calidad de secretaria de Estado adviritó que “cuando hay avances siempre hay miedo y hay gente dentro del PSOE a la que le da miedo avanzar. Nosotras estamos negociando con el PSOE que modifique la enmienda sobre los menores, pero de momento la mantiene. Confiamos en que nos escuche porque se trata de defender los derechos de las personas trans”.
El meollo de la polémica está en las enmiedas presentadas por el PSOE, que intentan provocar que para los menores de edad de entre 12 y 16 años puedan cambiar de sexo y someterse a tratamientos médicos deberán ir acompañados de sus padres o tutores. Además, propone eliminar la necesidad de nombrar un defensor judicial para los menores en el supuesto de desacuerdo de las personas progenitoras o representantes legales. El grupo justifica estas enmiendas en el supuesto interés superior del menor. Para Mar Cambrollé, presidenta de Plataforma Trans, el PSOE está sometiendo a las personas trans a un chantaje: “Estamos viviendo un momento histórico en nuestro país. Los derechos de las personas trans están siendo un campo de batalla ideológico donde las posiciones anti derechos abrirán la puerta a la ultraderecha, ante el peligro de que la Ley Trans finalmente no salga o lo haga con un recorte en derechos”. fin de la nota