Nueva York. Los mayores bancos de Estados Unidos se preparan para un deterioro de la economía el próximo año, ya que la inflación amenaza la demanda de los consumidores, dijeron altos ejecutivos este martes.
El presidente ejecutivo de JPMorgan Chase & Co JPM.N, Jamie Dimon, dijo a CNBC que los consumidores y las empresas están actualmente en buena forma, lo que podría no durar mucho más porque la economía se está ralentizando y la inflación erosiona el poder adquisitivo de los consumidores.
"Esas cosas podrían descarrilar la economía y causar esta recesión de leve a dura que preocupa a la gente", agregó.
Los consumidores tienen 1.5 billones de dólares en ahorros excedentes de los programas de estímulo pandémico, pero podrían agotarse en algún momento a mediados del próximo año, dijo a CNBC.
Dimon también agregó que la Reserva Federal podría hacer una pausa de tres a seis meses después de subir las tasas de interés al 5 por ciento, pero que eso podría "no ser suficiente" para frenar la elevada inflación.
El banco central estadunidense subió las tasas el mes pasado 75 puntos básicos por cuarta reunión consecutiva, hasta el 3.75-4 por ciento, pero también señaló que esperaba alzas menores de los costos de endeudamiento ya en la próxima reunión.
El presidente ejecutivo de Bank of America BAC.N, Brian Moynihan, dijo a los inversores en una conferencia financiera de Goldman Sachs que la investigación de Bank of America muestra un "crecimiento negativo" en la primera parte de 2023, pero que la contracción será "leve".
"El crecimiento económico se está ralentizando", señaló el presidente ejecutivo de Goldman Sachs, David Solomon. "Cuando hablo con nuestros clientes, suenan extremadamente cautos".
Para la banca, el mercado laboral sigue estando "sorprendentemente ajustado" y la competencia por el talento es "tan dura como siempre", dijo.