Doha. Nueva decepción de España, y gesta histórica de Marruecos, que eliminó a la Roja en penales (0-0; 3-0). Los Leones del Atlas se ganaron una plaza en la mesa de los grandes en cuartos de final del Mundial-2022, que regalarán choques estelares como el Países Bajos-Argentina o el Inglaterra-Francia.
La victoria de Marruecos este martes contra España en los penales fue la mayor sorpresa en los octavos de final, que se completarán con el Portugal-Suiza, en el que antes incluso de empezar saltó la noticia con la suplencia del astro luso Cristiano Ronaldo (19:00 GMT).
En la línea de las eliminaciones precoces de Bélgica (2ª del ranking FIFA) o de Alemania (11ª) en fase de grupos, la debacle del equipo dirigido por Luis Enrique (7ª) augura que este Mundial atípico por sus fechas y su ubicación geográfica reserva aún sorpresas.
Marruecos se coló por primera vez en su historia en cuartos e igualó la mejor actuación de un país africano en los Mundiales, y se jugará ante lusos o helvéticos meterse entre las cuatro mejores selecciones del mundo.
"Es histórico para Marruecos, es histórico para África. Dijimos que habíamos venido para representar a África, dijimos que nuestro nivel había aumentado", celebró el seleccionador marroquí Walid Regragui al micrófono de beIN Sports.
"Han jugado su partido, les ha salido bien, han sido mejores que nosotros en la tanda de penaltis. Se felicita", declaró por su parte Luis Enrique, que tras el partido no aclaró si seguirá como seleccionador de España: "A partir de la próxima semana, tranquilamente, cuando el presi (Luis Rubiales) estime oportuno, hablaremos de lo que realmente pueda importar del futuro, que me importa cero ahora mismo".
En 2018 los cuartos se habían resumido en un pulso entre Europa y Sudamérica. Cuatro años después, Marruecos ha roto ese duopolio, aunque el número de naciones europeas (cinco de ocho) alimenta el riesgo de ver continuado el dominio hegemónico de Europa, que dura desde la victoria de Italia en 2006.
'Acabar con el dominio europeo'
Brasil y Argentina, por supuesto, aún no han dicho su última palabra.
Lideradas respectivamente por Neymar y Lionel Messi, la Canarinha y la Albiceleste creen en sus opciones en este torneo que es la última oportunidad para Ney y para Leo de alcanzar la gloria.
"El Mundial de Qatar es una excelente ocasión de acabar con el dominio europeo", había declarado antes del torneo a la Afp Cafú, antiguo lateral y capitán de los campeones del mundo brasileños en 2002.
Luego de tres semanas de competición, Brasil ha impresionado por su fuerza ofensiva y por su rigor defensivo, a pesar de diez días de ausencia para Neymar, lesionado en un tobillo. Argentina, por su parte, ha ido de menos a más tras su inesperado revés inicial ante Arabia Saudita (2-1).
Pero no lo tendrán fácil en cuartos: Croacia, actual subcampeona del mundo y aún guiada por su director de orquesta Luka Modric, se presenta como un duro rival en cuartos el viernes (15:00 GMT).
Lo mismo se puede decir de Países Bajos del seleccionador Louis van Gaal, un equipo disciplinado y coherente capaz de frustrar al equipo de Lionel Scaloni.
"Será un partido muy hermoso entre dos selecciones históricas. Desgraciadamente una de ellas deberá irse", comentó el seleccionador argentino.
El otro partido del día, Portugal-Suiza (19:00 GMT), se presenta abierto y con la gran sorpresa de la suplencia de Cristiano Ronaldo.
Convincente desde el inicio del Mundial, superviviente de un grupo duro, muy organizada y con individualidades capaces de momentos brillantes como Breel Embolo o Xherdan Shaqiri, Suiza disputa sus cuartos octavos en cinco ediciones... En 2006, 2014 y 2018 no logró clasificarse a cuartos, como sí hiciese en 1954, en su Mundial, aunque en aquella edición sólo participaron 16 equipos.
"Estar en posición de hacer historia no es lo que cuenta para nosotros. Conocemos a nuestros rivales y demostramos que podemos ganarles. Después, quizá podamos hablar de historia", declaró el seleccionador Murat Yakin, cuyo equipo batió a Portugal 1-0 en la Liga de las Naciones en junio después de haber sufrido una derrota en Lisboa (4-0).
CR7 a la suplencia
Pero si hay alguien motivado para hacer historia ese es Cristiano Ronaldo. Si pasa y se clasifica a cuartos, este coleccionista compulsivo de récords podrá añadir otro a su larga lista, convirtiéndose en el jugador con más partidos internacionales en la historia del futbol, ex aequo con el kuwaití Bader al-Mutawa (196).
Aunque acaba de convertirse en el único en marcar en cinco Mundiales, su rendimiento en la fase de grupos acredita la tesis según la cual el inexorable crepúsculo de CR7 ya ha comenzado.
Su seleccionador, Fernando Santos, reconoció que "no le gustó" el comportamiento de su jugador, furioso después de ser sustituido y perder ante Corea del Sur, y ante la Nati verá el inicio del choque desde el banco.
Más allá de la perspectiva aún lejana de conquistar el más preciado de los trofeos, el quíntuple Balón de Oro podría ceder a los lucrativos cantos de sirena del Al-Nassr, con el que, según los responsables del club saudita, ya habría iniciado negociaciones.