Xalapa, Ver. Tres días después de haber sido reportada como desaparecida por sus familiares, Rosa Isela Castro Vázquez, una mujer con ocho meses de embarazo, fue localizada sin vida en un lote baldío en el municipio de Medellín de Bravo. Por este caso, la Fiscalía General del Estado tiene a dos personas detenidas.
Mara Castro Vázquez, hermana de la víctima, relató que Rosa Isela fue contactada a través de un perfil falso de Facebook, a través del cual la citaron en una farmacia en la colonia Las Bajadas, en el puerto de Veracruz, para entregarle ropa para su bebé.
Debido a los apuros económicos por los que pasaba, la futura madre decidió acudir a la cita. Pero después de varias horas de no saber de ella, su familia comenzó a preocuparse.
Las primeras indagatorias permitieron a la familia observar unos videos de cámaras de videovigilancia, como Rosa Isela es abordada por una mujer que la sujeta por la espalda, y la hace subir a un vehículo.
Después de 72 horas de búsqueda, la Fiscalía confirmó que el cuerpo sin vida de Rosa Isela fue localizado en el rancho “Los Arrieros” de la localidad Rancho del Padre, del municipio de Medellín de Bravo. Y que sus restos ya habían sido identificados por sus familiares.
También, informó que por estos hechos se hizo la detención de dos personas, identificadas como Gonzalo “N” y Verónica “N”, por su presunta responsabilidad en la desaparición de Rosa Isela “N”. Las institución destacó, que en el momento de su detención, tenían consigo a una menor recién nacida, la cual fue rescatada sana y salva y ya recibe atención de las autoridades correspondientes.
La Fiscalía Especializada en Investigación de Delitos de Violencia Contra la Familia, Mujeres, Niñas y Niños y Trata de Personas ha iniciado carpeta de investigación por la probable comisión del delito de feminicidio.
El feminicidio de Rosa Isela y el rapto del recién nacido, ha levantado la indignación de las sociedad civil, y de la organizaciones defensoras de los derechos de las mujeres, quienes exigen a las autoridades que el hecho no quede impune.