Ciudad de México. México se mantiene como el segundo receptor de remesas en el mundo al captar 54 mil millones de dólares el año pasado, sólo detrás de India, que sentó un precedente al recibir 100 mil millones de dólares en transferencias familiares también en 2021, informó el Banco Mundial (BM).
Se proyecta que en 2022 el país latinoamericano registre entradas récord de 60 mil 300 millones de dólares, 11 por ciento más que el año pasado, puesto que durante los primeros nueve meses el sólido mercado laboral estadunidense
se reflejó en un incremento de 15 por ciento en las transferencias familiares hacia México, reportó el organismo.
El crecimiento sostenido de las remesas hacia México se explica porque la tasa de desempleo de los latinos en Estados Unidos se redujo de 18.5 por ciento en abril de 2020 a 4.2 por ciento en octubre de 2022 y permitió un mayor envío de recursos hacia América Latina y el Caribe, explicó el BM.
Además, es probable que los crecientes volúmenes de migrantes en tránsito debido a los estrictos controles fronterizos en Estados Unidos hayan aumentado los flujos de remesas a la región, especialmente a México
, amplió en un informe.
La entrada de migrantes sin documentos a México aumentó en 5 por ciento anual durante los primeros nueve meses del año, pasó de 264 mil 772 personas en 2021 a 279 mil 185 en el periodo comparable de 2022. Además de que el país recibió más de 8 mil solicitudes de asilo de venezolanos, un aumento de 42 por ciento anual, consignó la institución.
México también acepta las expulsiones fronterizas terrestres del Título 42 de Estados Unidos de cinco países: México, El Salvador, Guatemala, Honduras y, más recientemente, Venezuela.
En suma, los migrantes en tránsito reciben fondos de sus familias fuera de México para cubrir los gastos de manutención y viaje y, en muchos casos, para pagar a los traficantes (coyotes) y eso en parte explica el repunte de las remesas, detalló.
El BM espera que las remesas hacia América Latina y el Caribe establezcan el ritmo más fuerte entre las regiones en desarrollo durante 2023, con un incremento de 4.7 por ciento.