Aguascalientes, Ags. Porfirio Sánchez Mendoza, quien pareció ayer al caer el helicóptero en que se trasladaba, asumió el cargo de secretario de Seguridad Pública del estado de Aguascalientes en 2018 y el 2 febrero de este año fue detenido por agentes de la Fiscalía General de la República, acusado de abuso de autoridad, tortura y falsedad de declaraciones judiciales en informes dados a una autoridad, a raíz de una denuncia presentada ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
El mando policiaco fue internado en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México; sin embargo, el primero de septiembre, un juez lo exoneró y ordenó liberarlo por no encontrar elementos suficientes para procesarlo
. Una semana después retomó el cargo de secretario de Seguridad Pública, ya en el tramo final del anterior gobierno estatal, a cargo del panista Martín Orozco Sandoval, el cual concluyó el día 30 de ese mes.
La investigación contra Sánchez Mendoza se inició en 2016, luego de la notificación de la CIDH sobre la apertura a trámite de una petición realizada por una víctima, quien aseguró que fue objeto de tortura por el funcionario y otra persona, luego de ser detenida sin motivo alguno por presuntos agentes de la extinta Policía Federal (PF), a la que aquél pertenecía entonces, al salir de un gimnasio en la capital del país.
Al asumir la gubernatura, el primero de octubre pasado, la mandataria panista Teresa Jiménez Esquivel lo ratificó en el cargo con el argumento de que era un hombre experimentado y había conseguido poner al estado entre los más seguros de México.
Al mismo tiempo, ante el pleno de la 65 Legislatura local, Jiménez Esquivel anunció la creación de la Agencia Estatal de Investigación Criminal, presidida por Manuel Alonso García; una semana después, en una sesión sin previa discusión ni análisis, el Congreso avaló el surgimiento de esa instancia.
Sánchez Mendoza fue colaborador en la Policía Federal durante el gobierno federal que encabezó Felipe Calderón (2006-2012) y estuvo bajo el mando del entonces secretario de Seguridad Federal, Genaro García Luna, aprehendido en 2019 en Estados Unidos por delitos relacionados con el narcotráfico.
Entre 2007 y 2010 se desempeñó de director de Operaciones Encubiertas de la PF: después fue titular de Tráfico y Contrabando en esa misma institución,
De 2014 a 2018 fue director de situaciones tácticas en la Coordinación de Operaciones Especiales en la División de Fuerzas Especiales de la PF; también fue coordinador de Investigación Técnica y Operación y de investigación de campo para casos de secuestro.
El 7 de junio de 2018, en la administración de Martín Orozco, tomó posesión como titular de la SSP, en sustitución del general en retiro Sergio Martínez Castuera.