Washington. Desde finales de octubre, cuando Elon Musk adquirió Twitter y despidió a prácticamente la mitad de sus 7 mil 500 trabajadores a nivel mundial, los acontecimientos en la empresa han sido un caos, y expertos y empleados de la compañía advierten riesgos graves a la seguridad a causa de la reducción drástica de personal y el profundo desorden, mientras en el Congreso ya se pide investigar presuntas violaciones a la ley.
En el más reciente capítulo, los empleados enfrentaron este jueves un plazo límite fijado a las 5 pm (hora del Este de Estados Unidos; 4 pm hora del centro de México) para responder a un correo electrónico de Musk, en el que se les pedía que hicieran clic en “Sí” en un enlace si querían formar parte del “nuevo Twitter”.
Los que no respondieran a esa hora recibirían una indemnización de tres meses de sueldo por despido, según su correo electrónico.
A medida que se acercaba la fecha límite para que los empleados de Twitter respondieran al ultimátum de Elon Musk de comprometerse a trabajar de manera “extremadamente dura” en la empresa o irse, algunos empleados parecieron indicar públicamente que habían elegido la última opción, señaló CNN Español y agregó que un ex ejecutivo de Twitter que recientemente salió de la empresa describió las salidas de empleados de este jueves como un “éxodo masivo”.
Por su parte, el diario The New York Times publicó que las instalaciones de la empresa están cerradas y así permanecerán hasta el lunes 21.
Musk, quien a finales de octubre completó la adquisición por 44 mil millones de dólares, despidió a buena parte de sus empleados de tiempo completo mediante un correo electrónico a principios de este mes, y se tiene previsto que elimine un número no especificado de trabajos temporales en el área de combate a la desinformación y demás contenido perjudicial.
Varios ingenieros tuitearon que fueron despedidos por decir algo crítico sobre Musk, ya fuera públicamente en Twitter o en un foro interno para empleados de la compañía.
En esencia, Musk está reformando la oferta en la influyente plataforma de redes sociales, y se desconoce si le ha informado a la Comisión Federal de Comercio (FTC, por sus siglas en inglés), al respecto, tal como lo establece el acuerdo de 2011.
Senadores piden investigar seguridad de Twitter
En respuesta al tumulto y los despidos masivos en Twitter luego que Elon Musk adquirió a la compañía, un grupo de senadores demócratas solicitó este jueves a los reguladores federales que investiguen cualquier posible violación por parte de la plataforma a las leyes de protección al consumidor o a sus compromisos con la seguridad de datos.
En las últimas semanas, Musk “ha tomado medidas alarmantes que han socavado la integridad y seguridad de la plataforma, y anunció nuevas funciones a pesar de las claras advertencias de que se abusaría de esos cambios para cometer fraudes, estafas y suplantación”, señalaron los siete senadores demócratas, encabezados por Richard Blumenthal, por Connecticut, en la misiva dirigida a Khan.
“Los usuarios ya están enfrentando las graves repercusiones de esta estrategia de crecimiento a cualquier costo”, escribieron, resaltando incidentes recientes de cuentas falsas que se hicieron pasar por el presidente Joe Biden, legisladores, deportistas y compañías, entre otros.
Los senadores también le pidieron a Lina Khan, directora de la FTC que tome las medidas necesarias en contra de Twitter y de los ejecutivos de la compañía por “cualquier violación o prácticas empresariales injustas o engañosas”.
“Nos preocupa que las acciones que han tomado el señor Musk y otros que forman parte de la gerencia de Twitter ya representen una violación al decreto de consentimiento de la FTC, el cual prohíbe la tergiversación y requiere que Twitter mantenga un extenso programa de seguridad de información”, señala la carta.
La FTC señaló la semana pasada que “ningún director general o compañía está por encima de la ley, y las compañías deben seguir nuestros decretos de consentimiento. Nuestra orden de consentimiento actualizada nos brinda nuevas herramientas para garantizar su aplicación, y estamos dispuestos a usarlas”.
La Comisión señaló la semana pasada que está “dando seguimiento a los acontecimientos recientes en Twitter con suma preocupación”.
Uno de los principales puntos a observar es un acuerdo de 2011 que firmó Twitter con la agencia (un decreto de consentimiento), en el cual se le requería a la compañía con sede en San Francisco atender fallas graves en la seguridad de datos.
Twitter pagó una multa de 150 millones de dólares en mayo pasado, varios meses antes de la adquisición de Musk, por violar el acuerdo. Una versión actualizada estableció nuevos procedimientos que obligan a la empresa a implementar un programa mejorado de protección a la privacidad, así como reforzar la seguridad de la información.
La agencia no aclaró si está investigando a Twitter por posibles violaciones. De ser el caso, tiene las facultades para exigir documentos y destituir a empleados.
Funcionarios de la FTC se negaron a comentar el jueves sobre la solicitud de los senadores.
Después de que la advertencia de la FTC saliera a la luz la semana pasada, Musk declaró “Twitter hará lo que sea necesario para apegarse tanto a la carta como a la esencia del decreto de consentimiento con la FTC”.