Ante la organización de la Conferencia Política de Acción Conservadora que se realizará en México, el presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que dicho encuentro, en el que se perfila la asistencia de personalidades de pensamiento conservador y de ultraderecha de Estados Unidos, América Latina, Europa y Asia, “ayuda” a informar sobre el pensamiento “racista, clasista y corrupto” de los conservadores.

El mandatario indicó que “si vienen todos esos personajes, tienen todas las libertades que se garantizan en México para reunirse, para manifestarse, para expresarse; no nos perjudica en nada”.

Consultado sobre el cónclave conservador, proyectado para desarrollarse el 18 y el 19 de noviembre en la Ciudad de México, el titular del Ejecutivo federal afirmó que su organización “nos ayuda en este plan que tenemos de ir informando, orientando, de cómo piensan los conservadores, de cómo son racistas, de cómo son clasistas, de cómo discriminan, de cómo son muy corruptos, de cómo no tienen escrúpulos morales de ninguna índole, de cómo son muy partidarios de la violencia. Entonces todo eso nos ayuda mucho”.

Entre los invitados a dicho encuentro está Steve Bannon, estratega del ex presidente estadunidense Donald Trump, y señalado por haber instigado el asalto al Capitolio en enero de 2021. También se perfila la asistencia del diputado brasileño Eduardo Bolsonaro, hijo del presidente de ese país, Jair Bolsonaro, quien recientemente perdió las elecciones presidenciales en las que buscaba reelegirse ante el líder de izquierda Luiz Inácio Lula da Silva.

López Obrador descartó que la reunión conservadora afecte la cumbre de la Alianza del Pacífico, en la que recordó que participará el presidente de Chile, Gabriel Boric; el mandatario de Ecuador, Guillermo Lasso; el presidente de Colombia, Gustavo Petro; la presidenta de Honduras, Xiomara Castro; el presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, y “está por confirmarse pero es muy probable que esté” el presidente de Perú, Pedro Castillo.

A la vez, acudirá a México el presidente de Argentina, Alberto Fernández, como invitado y,  sobre la invitación al presidente electo de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, dijo que “todavía no sabemos”.

En cuanto a la posible asistencia del presidente peruano, apuntó que Castillo está afrontando en su país una oposición que “es lo mismo, lo acusan de su origen, porque también hay mucho racismo ahí, y lo acusan también de no estar en sus cabales. Creo que el licenciado Muñoz Ledo dijo ayer o antier de que yo estaba ya chocheando y que ya no estoy cuerdo”.

En el caso de Castillo, añadió que en su país “lo están acusando de algo exagerado, de una inventiva, de que posiblemente él le conceda a Bolivia la salida al mar por territorio peruano, que posiblemente, y eso significaría un riesgo para la integración territorial del Perú”. Por posturas como esa, remató, la conferencia conservadora “va a dar nota”.

Durante su conferencia de prensa matutina, se refirió, además, al anuncio del gobernador de Texas, Greg Abbott, quien, entre otras medidas, declaró que busca militarizar la frontera y levantar un muro, así como hacer acuerdos con gobiernos locales.

Al respecto, el presidente expresó que “nada más que no debe de saber, hay que mandarle decir, de que la política exterior de México no la dirigen los gobiernos locales, sino el ejecutivo federal de acuerdo con nuestra Constitución”

Por si está pensando en hacer acuerdos con estados, insistió que la Constitución no lo permite. A la vez, agregó que “en cuanto el belicismo, nosotros somos gente de paz. Su fobia a los migrantes pues tampoco la compartimos porque casi todos somos migrantes, todos somos migrantes y en Texas está lleno de migrantes”.

Recalcó que Houston se fundó después de que se le quitó a México más de la mitad del territorio, en tanto que Texas está lleno de mexicanos, “y ya lo he dicho, uno puede estar en cualquier parte, pero el que no quiere a su patria de origen, no quiere a su madre, que es la patria”.