Monterrey, NL. El Congreso estatal aprobó por mayoría someter al gobernador Samuel García Sepúlveda a un proceso de revocación de mandato, al reformar la Ley de Participación Ciudadana de Nuevo León. Votaron a favor de las modificaciones legislativas 30 diputados –14 del Partido Acción Nacional (PAN), 13 del Partido Revolucionario Institucional (PRI), dos de Morena y uno del Partido Verde Ecologista de México—, y lo hicieron en contra los 11 del partido Movimiento Ciudadano (MC), en el cual milita el titular del Ejecutivo.
La reforma avalada, derivada de una iniciativa promovida por la bancada del PAN y apoyada por el PRI, fue aprobada por mayoría en la Comisión de Legislación el pasado 27 de junio. Legisladores de MC acusaron que los cambios llevaban “dedicatoria” contra el gobernador, y que fue “revivida” por panistas y priístas para demostrar su poder.
Los cambios legislativos alteraron una reforma ratificada en diciembre anterior, para que la consulta popular que podría resultar en la salida de García Sepúlveda se realice en 2025, y no hasta el sexenio estatal que iniciará en octubre de 2027.
En tribuna, el coordinador de la bancada emecista, Eduardo Gaona Domínguez, consideró que si las modificaciones no tenían fines políticos, también debería ser posible con ella revocar los cargos de diputados locales y presidentes municipales. En similar tenor se expresó su compañera de fracción, Iraís Reyes de la Torre.
Sandra Pámanes Ortiz, también de MC, afirmó que las reformas obedecían a una “sed de venganza”.
En respuesta, el panista Luis Susarrey afirmó que pretender llevar a los legisladores locales y a los alcaldes a una revocación de mandato sería una acción “populista y costosa”.