San Cristóbal de Las Casas, Chis. Entre exigencias de que se haga justicia, fue sepultada Estefanía Martínez Matías, estudiante de enfermería encontrada muerta el sábado en Tuxtla Gutiérrez.
La joven, de 22 años, que laboraba en una tienda de ropa en la capital del estado para pagar sus estudios, fue inhumada la tarde del martes en el panteón de la comunidad de Palestina, ubicada en el municipio de Ángel Albino Corzo, en la región de la Fraylesca, de donde era originaria.
Al hablar durante el entierro, uno de sus tíos comentó que trabajadores migrantes de Palestina cooperaron para que el cadáver fuera traslado de Tuxtla Gutiérrez a esa localidad.
“Lo que ha sucedido con Estefanía nos indigna; estos casos nomás los habíamos escuchado en la televisión, jamás nos podíamos imaginar que podía suceder en el seno de nuestras familias. Lo que le hicieron no se vale”, expresó.
Junto al féretro de madera manifestó que la familia ha pasado días “de mucha tristeza y coraje. Vamos a estar muy pendientes, no vamos a estar tranquilos hasta que se haya hecho justicia a Estefanía y se dé con el paradero del o los asesinos”.
Antes de pedir a los asistentes al sepelio un aplauso para despedir a la joven, agregó: “Nosotros creemos en la justicia; es el momento que nos lo demuestren”.
Martínez Matías fue hallada muerta el 5 de este mes, seis días después que su desaparición ocurrida el 30 de octubre, después de que acudió a una fiesta acompañada de un amigo.
Su cuerpo fue hallado en estado de descomposición por una brigada de búsqueda de la Fiscalía General del Estado, a un costado de la carretera a la colonia Emiliano Zapata, situada en el sur poniente de Tuxtla Gutiérrez, luego de que familiares y amigos realizaron una protesta en la capital.