Ciudad de México. A Hipnosis le tocó una tarde soleada de noviembre. Desde temprano el Parque Bicentenario fue cubierto con un cielo despejado y el sol picante que cayó encogió la sombra de los asistentes. Poco a poco, después de las cuatro de la tarde, el espacio vio desfilar -al ritmo de sonidos densos y psicodélicos, cortesía de Psychedelic Porn Crumpets y Babe Rainbow- cientos de almas que llegaban ansiosos de ocupar un lugar en la celebración. También se dejaron caer uno que otro fallo, como el del micrófono de John Dwyer, vocalista de Osees, errata que compensó con derroche de energía propio del garage rock.