Al responder a lo que calificó como “cúmulo de ataques y mentiras”, luego de la publicación de su comunicado en el que, entre otras cosas, recomienda la transformación del Instituto Nacional Electoral (INE) y cuestiona su autonomía, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) alertó “sobre los intentos de partidos políticos y de grupos parlamentarios para acallarla y desviar su trayectoria”.
Anunció que se defenderá ante las instancias nacionales e internacionales, “porque el asedio está llegando a límites que ponen en peligro la autonomía y la misión constitucional de esta Comisión, y es nuestro deber preservarla de la politiquería para que siga afirmándose y fortaleciendo como la defensoría del pueblo que estamos empeñados que sea”.
Manifestó su extrañamiento frente a la postura del INE que, “desoyendo la voz del pueblo -que él mismo recogió en una encuesta que ha tratado de esconder-, se resiste a su transformación”.
La CNDH que encabeza Rosario Piedra Ibarra, si bien reconoció que la Constitución limita la actuación de la comisión por lo que toca a los asuntos electorales, destacó que su Recomendación General 46/2022 -en la que se enmarcaron los señalamientos sobre el instituto-“cumple totalmente con el mandato otorgado por el artículo 102 Fracción B.
“No aborda la materia electoral, no se inmiscuye en las funciones del INE ni pretende rectificar sus decisiones. Lo que pretende es incidir en una transformación del sistema democrático, para fortalecer sus instituciones”, puntualizó.
“Es totalmente falso que la Recomendación invade la esfera de competencia del INE, pues no hace referencia a procesos electorales específicos, sino a temas de administración y política pública, y antes bien promueve su fortalecimiento mediante la afirmación de su independencia de cualquier grupo partidista, económico o social, y de su identificación y empatía con el pueblo de México”, insistió.
Señaló que al evocar en su recomendación general, el uso faccioso de los órganos electorales del Estado en las elecciones de 1952, “no pretende corregir su resultado, lo hace con el objeto de brindar herramientas que permitan a las autoridades a las que se dirige, establecer de manera diligente todas aquellas medidas necesarias para la implementación de políticas públicas de progresividad referente al derecho a la democracia, de reunión, de asociación, a la protesta social, así como a los derechos de memoria y de verdad, con relación a las graves violaciones a derechos humanos derivadas de la práctica sistemática de la violencia política ejercida por el Estado en México, durante el período 1951-1965, con miras a garantizar su no repetición”.
Sobre lo que han dicho de la CNDH algunos senadores, “con claros fines inhibitorios”, respecto a que en lugar de discutir la reforma electoral la comisión se debería centrar en la defensa de las garantías individuales, mencionó que ello “denota un profundo desconocimiento de los derechos humanos -uno de los cuales es el derecho a la democracia-, pero también de nuestras funciones, que cumplimos a cabalidad, y con creces, en comparación con lo que acaecía en el pasado”.
La CNDH argumentó que hoy “en efecto tenemos mucho trabajo, por eso se emiten el mayor número de recomendaciones de toda la historia” de la comisión, y también de acciones de inconstitucionalidad.
“Nunca como ahora la CNDH ha trabajado tanto, con menos recursos (de hecho operamos este año con menos presupuesto del que se tenía en 2017) porque hemos eliminado todos los gastos superfluos, desde luego los sobresueldos por encima del Presidente de la República y las prestaciones y los bonos millonarios para los altos mandos, y lo más importante, que todo lo que hacemos es privilegiando el interés de las víctimas”, agregó.
Respecto de las “descalificaciones que pretenden fundarse en la ‘inconstitucionalidad’ de la Recomendación General 46/2022 para anular sus efectos”, señaló: “nada más absurdo, sobre todo porque se trata de un instrumento de esta Comisión, para orientar políticas públicas, que está previsto por la Ley, y que al ser emitida tal cual establece nuestro Reglamento, reviste toda la legalidad que es menester para este tipo de recursos”.
Como está a la vista, “de ningún modo esta Comisión Nacional se ha extralimitado en las facultades que las leyes le otorgan, mientras que los que contradicen la Recomendación General 46/2022, si mienten al sostener dicho argumento”, sostuvo.
La CNDH también se refirió particularmente a la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado, Kenia López. “Una vez más recurre a la denostación a la CNDH para abonar a su agenda política personal, que nada tiene que ver con derechos humanos sino con su necesidad de posicionamiento para obtener una candidatura en 2024. Simplemente no es moral ni es ético ni es legal, por lo que esperamos rectifique en atención al cargo y responsabilidad que ostenta”.
En cuanto a los siete consejeros de la CNDH que también rechazaron el comunicado de este organismo, dijo que sus señalamientos son “la repetición de las consabidas consignas de los partidos pero una contradicción de su propia actuación”, y los cuestionó sobre si no se percataron de lo que ellos mismos revisaron y aprobaron “¿O alguien los hizo cambiar de opinión?”
Señaló que las atribuciones de los consejeros “no se encuentra ser parte de la intromisión injustificada que estamos viendo en la actuación de un órgano autónomo, como es la CNDH, a la que sin recato alguno se amenaza, por parte de unos, con amordazarla o, por lo menos, con eliminar a su titular ‘como castigo’. Y por los consejeros, con estarle saboteando cada paso o cada decisión tomada en el marco de su propia legalidad interna”.
Aseveró que “la CNDH, y menos su presidenta, no hacen ‘interpretaciones políticas’, lo que hacemos y estamos obligados a hacer es el seguimiento de la Recomendación 46/2022, y lo seguiremos haciendo, que no quepa duda, por lo que ojalá a él se sumen autoridades y representantes, en especial las y los legisladores que tienen en sus manos actuar sobre su cumplimiento”.
Reiteró que estos diferentes con todos los actores anteriormente citados, también denotan los intereses que se juegan con motivo de la reforma electoral.
Invitó a la ciudadanía a leer y conocer el contenido la Recomendación General 46/2022 “para formar criterios propios y no sucumbir ante la maquinaria mediática que, una vez más, fue activada para cuestionar y denostar sin realizar una lectura crítica y objetiva de dicho documento”.