Rusia reanudó el bloqueo de los puertos ucranianos el domingo, cortando las exportaciones de granos que se necesitan con urgencia en otras partes del mundo, en lo que el presidente estadunidense, Joe Biden, calificó como un acto “realmente escandaloso”.
Hablando en Wilmington, Delaware, Biden advirtió el sábado que el hambre mundial podría aumentar porque Rusia suspendió un acuerdo negociado por la ONU para permitir el paso seguro de barcos que transportan granos desde Ucrania, uno de los graneros del mundo.
“Es realmente escandaloso”, dijo Biden. “No hay mérito en lo que están haciendo. La ONU negoció ese acuerdo y ese debería ser el final”.
Biden habló horas después de que Rusia anunció que detendría de inmediato su participación en el acuerdo con el argumento de que Ucrania organizó un ataque con drones el sábado contra los barcos de la flota rusa en el Mar Negro ante la costa de la ocupada Crimea. Kiev ha desmentido el ataque.
Un barco que transportaba 40 mil toneladas de grano con destino a Etiopía bajo el programa de ayuda de Naciones Unidas no pudo salir de Ucrania el domingo como resultado del bloqueo ruso, tuiteó Oleksandr Kubrakov, ministro de infraestructura de Ucrania. No especificó de qué puerto ucraniano iba a zarpar el Ikraia Angel.
Esta iniciativa ha permitido que más de 9 millones de toneladas de cereales en 397 barcos salgan de forma segura de los puertos ucranianos desde que se firmó el acuerdo en julio. El jefe de la ONU, António Guterres, instó el viernes a Rusia y Ucrania a renovar el acuerdo cuando expire el 19 de noviembre. El pacto logró reducir los precios mundiales de los alimentos en un 15% desde su punto máximo en marzo, según la ONU.
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, describió la decisión como predecible y dijo que Rusia ha agravado de forma deliberada la crisis alimentaria desde septiembre. En este momento hay unos 176 barcos cargados con grano que no pueden salir de puertos ucranianos, dijo.
“Esto es comida para más de 7 millones de consumidores (...) ¿Por qué un puñado de personas en algún lugar del Kremlin puede decidir si habrá alimento en las mesas de la gente en Egipto o Bangladesh?”, dijo el sábado en su mensaje nocturno a la nación.
Rusia solicitó una reunión el lunes del Consejo de Seguridad de la ONU para discutir el presunto ataque y la seguridad del corredor de granos del Mar Negro. Guterres retrasó un día un viaje a Argel para entablar conversaciones destinadas a poner fin a la suspensión del acuerdo de exportación de granos por parte de Rusia.
Las acciones de Rusia han provocado condenas internacionales. El jefe de política exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, instó a Rusia a revocar su decisión en un tuit el domingo. Stephane Dujarric, vocero del secretario general de la ONU, dijo que el organismo está en contacto con las autoridades rusas y que es vital que todas las partes eviten acciones que puedan socavar la iniciativa.
Rusia llevaba un tiempo fijando condiciones para no retirarse del acuerdo, según indicó el Institute for the Study of War, un centro de estudios con sede en Washington. Incluso si Ucrania ordenó el ataque a la flota del Mar Negro, habría sido proporcional a la campaña rusa de bombardeos contra infraestructura y objetivos civiles ucranianos en las últimas semanas, añadió el centro.
Moscú intensificó este mes sus ataques de misiles y drones contra centrales energéticas ucranianas, instalaciones de agua corriente y otra infraestructura clave. La ofensiva ha dañado el 40% de la red eléctrica ucraniana y obligado al gobierno a programar apagones.
En las últimas 24 horas, los misiles rusos han matado al menos a cinco personas y herido a nueve, según un comunicado de la oficina del presidente. En los intensos combates en el este de Ucrania, Rusia intenta tomar la ciudad de Bakhmut y varios centros y poblados de la zona han sufrido ataques.