Entre 2010 y 2021, el número de menores de 12 años que arribó a México se incrementó de manera importante de 839 a 52 mil 484, según los registros del Instituto Nacional de Migración (INM), y en 2014 apenas sumaban 8 mil 828, hizo notar ayer el Instituto para las Mujeres en la Migración (Imumi).
En un taller en la materia, Rosalba Rivera, coordinadora de infancia migrante del Imumi, destacó que en 2021 se tuvo en general una superalza
de niños, niñas y adolescentes (NNA) en contexto de movilidad al sumar 75 mil 592, mientras en 2019 se registraron 53 mil 507 y en 2020 fueron 11 mil 262, por la pandemia de covid-19. Estos datos, de acuerdo con cifras de la Unidad de Política Migratoria, relacionada con eventos de detención de menores canalizados por las autoridades.
Explicó que el aumento de 2021 se puede relacionar con el término del confinamiento por la emergencia sanitaria y porque el registro de los menores ya no sólo depende del INM, sino también del Sistema de Desarrollo Integral de la Familia (DIF) nacional, que está obligado a tener sus cifras, los niños que llegan a los centros de asistencia social de los DIF estatales y municipales y también los que llegan a los lugares de acogi-da privados
.
Detalló que hasta septiembre de 2022 se tenía un total de 38 mil 844 NNA registrados, de los cuales 6 mil 711 fueron devueltos a sus países de origen, y se tiene conocimiento que poco más de 18 mil 800 menores que estaban en un proceso migratorio lo abandonaron, sin que se tengan claros los motivos.
Rivera expuso que entre los perfiles de los niños, niñas y adolescentes que migran están mayoritariamente los menores que lo hacen junto con familiares o personas no consanguíneas, pero también los hay no acompañados; los que han nacido en los países de destino y cuyos padres son migrantes; los que se quedan en sus países de origen pero sus padres han migrado, y los que retornan a sus lugares de origen de manera forzada o voluntaria.