Querétaro, Qro. Estudiantes de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) mantienen un paro y la toma de instalaciones de esa casa de estudios en demanda de que las autoridades universitarias actúen ante el acoso presuntamente cometido por estudiantes y profesores en distintas fechas y momentos.
El caso que detonó el paro es el del alumno Robert N, señalado en junio pasado ante la Unidad de Atención de Violencia de Género (UAVIG) de dicha institución por violentar presuntamente a una compañera de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPS).
En un comunicado, la noche del jueves la directora de la FCPS, Marcela Ávila-Eggletón, dio a conocer que la UAVIG fue informada al respecto que por “lo delicado de los hechos y en razón de que el probable responsable presuntamente hace portación de arma de fuego dentro de las instalaciones de la Universidad, la persona en situación de víctima no deseaba iniciar un proceso formal”.
Las medidas cautelares iniciales por parte de la UAVIG consistieron en que el presunto agresor fuera cambiado al turno matutino para evitar que se encontrara con la joven en algún espacio del plantel, pero el acoso continuó.
Por lo anterior, la estudiante solicitó tomar clases en línea y presentar la denuncia; sin embargo, al pedir información del avance de la indagatoria que comenzó hace tres meses, le dijeron que la carpeta de investigación estaba cerrada.
Los alumnos de esa facultad se manifestaron la noche del jueves por la falta de atención de la rectoría, que preside Teresa García Gasca; se sumaron estudiantes de otras escuelas de esa casa estudios que decidieron tomar las instalaciones en demanda de que se actúe en consecuencia, pues recordaron que hay otros casos de acoso en sus distintas modalidades.
Al filo de las 12 horas de este viernes, las autoridades universitarias y alumnos sostuvieron una reunión durante más de dos horas en donde García Gasca indicó que las medidas cautelares de la UAVIG en el caso de Robert N se determinaron en función de la información disponible.
También refirió que hay un nuevo diagnóstico tras revisar nuevamente la situación y concluyeron suspender al acusado sin llegar a la expulsión, pues derivado de experiencias pasadas, los casos se revierten por la vía judicial si actúan de forma apresurada.
Los estudiantes demandaron que, para levantar el paro, la rectora de la UAQ tiene que grabar un video en donde les ofrezca una disculpa por no atender de forma adecuada los distintos casos denunciados ante la UAVIG en los que trabajan ocho mujeres entre abogadas, sicólogas y criminólogas.