Ciudad de México. La inversión extranjera directa (IED) de China en México se encuentra en su nivel más bajo desde 2015; paralelamente, el monto de los proyectos de infraestructura que el gigante asiático desarrolla en nuestro país también se ubica en su peor punto desde 2018, revelan datos tanto públicos como privados.
Cifras de la Secretaría de Economía (SE) indican que en el primer semestre de 2022 la IED de China en México se colocó en 47 millones 300 mil dólares, cifra 54 por ciento inferior a los 103 millones 93 mil dólares registrados en el mismo periodo del año pasado. La cifra para un lapso similar no era tan baja desde los 28 millones de 2015.
En tanto, el Monitor infraestructura 2022 presentado la semana pasada por el Centro de Estudios China-México (Cechimex), de la UNAM, indica que en 2021 (dato más reciente) China concretó la inversión para cinco obras de esa índole, las cuales representaron un monto de 215 millones de dólares.
El dato palidece frente a los registrados en 2019 y 2020, pues en cada año se concretaron siete proyectos de infraestructura chinos, los cuales tuvieron un valor de 2 mil 117 y 2 mil 817 millones de dólares respectivamente.
No obstante, el reporte del Cechimex deja ver que la desaceleración de la inversión de China no sólo sucede hacia México, sino a toda América Latina, pues en 2021 reportó 28 obras de infraestructura por 6 mil 638 millones de dólares, cuando en 2020 fueron 29, por 25 mil 593 millones de dólares.
Contexto complicado
Para Enrique Dussel Peters, coordinador del Cechimex, la relación comercial de México y China a lo largo de 50 años ha logrado un proceso significativo de maduración y complejidad, tanto en su extensión como en su profundidad; sin embargo, ha habido grandes retos y diferencias, sumado a que ninguna administración mexicana ha creado una estrategia comercial a corto, mediano y largo plazos respecto a China.
Asimismo, destacó que China atraviesa por un momento complicado tras la pandemia, pues en el periodo de recuperación el gasto público corriente se redujo de 24.7 por ciento del PIB en 2020 a 23.8 por ciento en 2021, con afectaciones significativas en la inversión.
En este contexto, afirmó Dussel Peters, México y otras naciones de la región presentan riesgos derivados de la recuperación incierta de la pandemia y subsecuentes rupturas en la cadena de suministro global, así como por altas tasas de inflación, aunadas a la invasión de Rusia en Ucrania y a las tensiones militares entre EU y China en torno a Taiwán, lo cual afecta también los precios de energéticos y alimentos.
Según el Monitor del Cechimex, de 2005 a 2021, China acumula un total de 192 proyectos de infraestructura activos por un valor de 98 mil 383 millones de dólares, mismos que dan empleo a 673 mil 608 personas. Del total de obras, 9.4 por ciento se encuentran en México.
El coordinador del organismo destacó que a pesar del bache registrado en 2021 por los factores antes señalados, la inversión de China en México y América Latina ha ido creciendo, por lo que se espera que el periodo de 2020 a 2024 sea el más importante en la relación entre el gigante asiático y la región.