Pachuca, Hgo. En demanda de que se les restituya el derecho de usar un millón 250 mil metros cúbicos de agua al año de una presa  para sus cultivos, la  mañana del martes, cerca de 400  pobladores provenientes del municipio de Huasca de Ocampo tomaron las oficinas de la delegación federal de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) ubicadas en la ciudad de Pachuca para exigir la construcción de una represa así como mayores volúmenes de agua para sus cultivos.

Alejandro Hernández Ballina, representante de los campesinos , dijo que la presa San Carlos, ubicada en ese municipio , fue construida por los ancestros de 400 agricultores  quienes por años tuvieron una concesión de Conagua para el uso de un millón 250 mil metros cúbicos al año .

“Se  les terminó la concesión y malos funcionarios de la Conagua, no de ahorita sino que antes laboraban en esa dependencia,  les  renovaron la concesión pero con una reducción del 50 por ciento el volumen”.

Esto de acuerdo a Hernández Ballina tenía como fin provocar conflictos y peleas entre los agricultores para desunirlos.

Posteriormente, para exigir que se les restituyera el permiso para explotar 635 mil metros cuadrados de agua que se les habían quitado, Hernández Ballina explicó que los afectados acudieron a las oficinas centrales de la Conagua para que se analizara el asunto,  pero se emitió otro dictamen en el que se les confirmó la reducción de la mitad del liquido.

Ante la escasez de agua que hay en la presa y las restricciones que les impuso la Conagua decidieron tomar la delegación. “Estamos exigiendo que se haga un estudio de campo, para que los funcionarios de Conagua se den cuenta de que los agricultores necesitan el volumen de agua que tenían y así elaboren otro dictamen”.  

Los campesinos llegaron a las instalaciones de la Conagua ubicadas en Zona Plateada alrededor de las 9.00 horas de la mañana a bordo de cuatro autobuses, provenientes de la cabecera municipal de Huasca.

Al momento en que comenzaron a concentrarse en las puertas de acceso de la dependencia federal, el edificio fue evacuado por algunos empleados, pero algunos no alcanzaron a salirse.

En el interior del inmueble sólo se quedaron Eber Salazar, director de la Delegación de Conagua en Hidalgo y algunos de los subdirectores de la dependencia.

Los campesinos tras bloquear las puertas de cristal, impidieron el ingreso de personas y mantuvieron tomado el edificio durante más de siete horas.

En ese lapso sostuvieron una reunión con Eber Salazar y otros subdirectores de Conagua para tratar el asunto.

Tras la reunión , abandonaron el lugar sin revelar los acuerdos a los que habían llegado con los representantes de la Conagua.