Ciudad de México. El juzgado tercero de distrito en materia penal, con sede en Tamaulipas, absolvió al ex alcalde de Iguala, Guerrero, José Luis Abarca Velázquez, de tener responsabilidad en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, al considerar que el Ministerio Público Federal no aportó pruebas suficientes que acreditaran la acusación.
Sin embargo, Abarca Velázquez permanecerá en prisión pues se encuentra sujeto a proceso penal por el homicidio de los activistas Arturo Hernández Cardona, dirigente de la Unión Popular Campesina Emiliano Zapata (UPEZ) y los activistas Félix Bandera Román y Ángel Román Ramírez, en hechos ocurridos en junio de 2013. Presuntamente el secuestro y los homicidios ocurrieron porque los campesinos exigían abono para sus cosechas.
La resolución en favor de Abarca Velázquez podrá ser recurrida por la Fiscalía General de la República y el caso sería analizado por un tribunal unitario.
El ex alcalde de Iguala fue señalado desde las primeras investigaciones relacionadas con la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa como uno de los involucrados en lo sucedido el 26 de septiembre de 2014, cuando policías de ese municipio, de Huitzuco y Cocula, participaron en la privación de la libertad de los estudiantes y su posterior entrega a integrantes del cártel Guerreros Unidos.
El pasado agosto el presidente de la Comisión para la Verdad y el Acceso a la Justicia (Covaj) para el Caso Ayotzinapa, Alejandro Encinas, también subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación (SG), dio a conocer avances de la investigación que se realiza actualmente y señaló que la orden de desaparecer a los 43 normalistas de Ayotzinapa la dio El A1, quien presuntamente sería el ex alcalde de Iguala, José Luis Abarca, y dirigentes del grupo delictivo Guerreros Unidos, en colusión con otras autoridades de diversos órdenes de gobierno.
En noviembre de 2015 el juzgado tercero de distrito en materia penal con sede en Toluca dictó auto de formal prisión en contra José Luis Abarca por los delitos de delincuencia organizada, operaciones con recursos de procedencia ilícita y enriquecimiento ilícito.
En esa fecha Abarca fue señalado como uno de los responsables de los ataques y privación ilegal de la libertad de los estudiantes de la Normal de Ayotzinapa, aunque no se concretó una orden de captura por el delito de desaparición forzada de los 43 estudiantes en los hechos ocurridos el 26 de septiembre de 2014.
Respecto de los testigos colaboradores que utilizó la extinta Procuraduría General de la República para imputar el cargo de delincuencia organizada al ex alcalde de Iguala, en el expediente que judicializó el Ministerio Público se menciona a Sergio Villarreal Barragán, El Grande, cuyo nombre clave era Mateo, integrante del cártel de los hermanos Beltrán Leyva, y Eynar Rodrigo Lozano Mendoza, un integrante de Guerreros Unidos.
