La Cámara de Diputados inició el debate de la reforma constitucional que amplía a 2029 la intervención militar en seguridad pública, y desde la tribuna el presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, Juan Ramiro Robledo (Morena), defendió que la defensa nacional ya no se limita a la seguridad exterior, sino contra la capacidad de fuego del crimen organizado.
En el debate político, PAN y PRD llamaron al PRI a “recapacitar” y no aprobar la reforma que ese mismo partido propuso, pero el coordinador del tricolor, dijo a la prensa sobre la necesidad de aprobar el cambio al artículo 5º transitorio de la reforma constitucional de 2019 con la cual se creó la Guardia Nacional:
“O estamos con el Ejército o con el narco, tan sencillo. Y yo fui gobernador”.
Paralelo al arranque del debate en el pleno, los coordinadores de Acción Nacional y de la Revolución Democrática, Jorge Romero y Luis Espinosa, dieron una conferencia de prensa.
El panista sostuvo que, al alargar el plazo, se confirma que “a este gobierno no le interesa una policía civil, sino militarizar la seguridad ciudadana. Creemos que una policía militar no corresponde a una democracia, y hay muchos ejemplos”.
Insistió que el PRI recapacite, para que la coalición Va por México “se mantenga viva, en congruencia con lo legislativo”.
Al mismo tiempo, en la tribuna, Juan Ramiro Robledo incluso llamó a terminar con el divorcio entre los conceptos de seguridad nacional, seguridad interior y seguridad pública, y que los tres sean concentrados “en un solo concepto de seguridad”.
Para defender la necesidad de que se mantenga la facultad del Presidente para utilizar a militares y marinos en tareas de seguridad pública, sostuvo:
“La defensa nacional o la seguridad nacional, la seguridad exterior, ya no está fuera del país. Esto se ha repetido muchas veces: no estamos en posibilidad de ir a la guerra. La amenaza a la seguridad nacional es adentro, del potencial tan fuerte, de las organizaciones, con capacidad de fuego, en otras palabras, la seguridad nacional golpea hacia dentro del país.
El PAN y el PRD presentaron, por separado, distintas mociones suspensivas, mecanismo que se usa para pedir el retiro del dictamen y devolverlo a comisiones.