Ginebra. El prolífico director de cine suizo Alain Tanner, considerado pionero del movimiento cinematográfico de la nueva ola en su país, murió ayer a los 92 años, informó la asociación que lleva su nombre.
Reconocido internacionalmente, Tanner fue una de las principales figuras del cine suizo y uno de los fundadores de la nueva ola en los años 70 en compañía de sus colegas Michel Soutter, Claude Goretta, Jean-Louis Roy y Jean-Jacques Lagrange
, añadió la asociación en un comunicado difundido de acuerdo con la familia
.
Estos cineastas crearon el Grupo de los Cinco en 1968, el cual renovó el séptimo arte suizo, que refleja el espíritu de inconformidad que caractizó la época.
Alain Tanner, cuyo primer largometraje, Charles mort ou vif (Charles, vivo o muerto), anunció el comienzo del nuevo cine helvético. La cinta marcó en 1969 el inicio del cine comprometido políticamente en Suiza.
El director del Swiss Film Archive, Frédéric Maire, llamó a Tanner un monumento del cine [suizo]
.
Era el nuevo cine suizo y, sin embargo, sus películas siguen siendo modernas
, afirmó el funcionario.
Con Charles mort ou vif, Tanner el Leopardo de Oro en el Festival de Cine de Locarno. Luego rodó decenas de largometrajes. Obtuvo el Gran Premio del jurado en el festival de Cannes por Les Années lumière (Los años luz, 1981) y un César a la mejor película francesa por Dans la ville blanche (En la ciudad blanca, 1983).
Entre sus obras más conocidas también figuran La salamandra y Jonás, quien tendrá 25 años en el año 2000.
Alain Tanner comenzó su carrera a fines de los años 50. (Él) es, sin duda, el cineasta suizo más conocido
en el extranjero, afirmó el director nacido en Lausana Lionel Baier, quien agregó que algunos en Portugal incluso consideran En la ciudad blanca como la película más hermosa jamás realizada sobre Lisboa.
Tanner, según el portal Swissinfo, creía que su Suiza natal era demasiado hermosa y espectacular
para ser filmada, agregó Baier. Sin embargo, sabía cómo mostrar la violencia suiza
y buscar el drama en un país que no lo había planeado. En la década de 1960, apoyó la redacción de la ley sobre el cine y la financiación pública de las películas de su país.
Realizó su último largometraje, Paul s’en va, en 2004. Bastante había luchado por la cultura y el cine, señaló el director en una entrevista con motivo de su cumpleaños 80.
El realizador consideraba que sus películas siempre han representado un acto de equilibrio entre aquellas cintas cuyo objetivo es el discurso, el concepto, y aquellas que parten de lo material, de las emociones, el comportamiento y las localizaciones
.
El equipo de trabajo de Tanner ingresó al Archivo Fílmico Suizo en 2014.
Con información de la Redacción.