San Cristóbal De Las Casas, Chis., Con el argumento de que tiene cuatro meses de embarazo, autoridades de la Escuela Preparatoria número 2 de Tapachula negaron la reinscripción al quinto semestre a una estudiante de 17 años, denunció el Colectivo Diálogos sobre Derechos Humanos.
La organización reclamó además que el director de la institución, Miguel Ángel Montelongo Orellana, impuso un reglamento que viola el derecho a la educación y al libre desarrollo de la personalidad de los jóvenes, al decidir qué largo deben vestir las faldas las estudiantes y obligar a los hombres a llevar el cabello corto, entre otras medidas.
La defensora Cecilia Isaguirre señaló que Montelongo Orellana incurrió en conductas excluyentes y misóginas al negar el ingreso de la joven a la institución educativa
, mientras al novio de ésta, también adolescente, y quien sería padre del bebé, le permitió recibir clases sin ninguna objeción.
Isaguirre aseguró que esta situación se trata de un tema de discriminación recurrente y sistemático que además se reglamenta en la escuela, ejerciendo con ello violencia sexista
.
Se quiere superar, dice la madre de la menor
Sonia Araceli López Miranda, madre de la estudiante afectada por esta circunstancia, lamentó que a pesar de que ya había realizado el pago de la inscripción y cumplió con todos los requisitos que solicitaba el plantel, no le dieron la oportunidad a su hija de recibir los servicios educativos. No se vale, porque le están negando la enseñanza a mi hija cuando ya se encuentra en el último año de bachillerato; a pesar de estar embarazada, ella quiere seguir superándose
, refirió la mujer.
El colectivo dio a conocer que interpuso una denuncia ante la Fiscalía de Distrito Fronterizo Costa, una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos y un amparo ante el Tribunal de Justicia para que se exija al director de la preparatoria número 2 permitir el acceso a la adolescente al centro educativo y no se violen sus derechos.
Asimismo, la agrupación pidió a la secretaria de Educación del estado, Rosa Aidé Domínguez Ochoa, que revise el caso, pues la mayoría de los reglamentos escolares promueven la violencia sexista y discriminación de las adolescentes en gestación.
Estar embarazada no afecta el aprendizaje, y al contrario, al evitar que las jóvenes puedan concluir sus estudios, se les está negando a que tengan mejores oportunidades laborales y calidad de vida para ellas y sus familias
, subrayó.