El presidente Andrés Manuel López Obrador informó que hasta ahora el gobierno de Estados Unidos no ha dado respuesta a su comunicación diplomática en la que pidió una aclaración sobre el financiamiento por parte de Washington a la organización Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad, la cual el mandatario mexicano ubica de carácter político por lo que califica que la entrega de esos recursos son “intervencionistas”.

Interrogado en la mañanera de este martes sobre el tema, luego que ha pasado un año y tres meses que envió la comunicación a la administración de Joe Biden, López Obrador señaló que no ha habido respuesta “y todo indica” que la Casa Blanca sigue financiando a este grupo.

“Es algo en lo que nosotros no coincidimos con el gobierno de Estados Unidos. Llevamos muy buena relación, pero hay prácticas políticas que consideramos inapropiadas. Consideramos que son actos intervencionistas, ningún gobierno tiene el derecho de intervenir en asuntos de otras naciones, no existe un gobierno mundial, cada país tiene su gobierno que debe ser libre, independiente, soberano. Entonces nosotros no estamos de acuerdo en que ningún gobierno extranjero intervenga en asuntos que sólo corresponden, sólo competen a los mexicanos”.

El titular del Ejecutivo federal acotó que no se trata sólo de confrontar a Washington por este intento de intervención, sino que su mensaje es para “cualquier hegemonía, sea Rusia, China o Estados Unidos. No aceptamos ese intervencionismo, es parte de una política colonialista, muy atrasada, anacrónica, que no tiene que ver con los nuevos tiempos y que implica una actuación irrespetuosa de otros pueblos, es contraria a las buenas relaciones internacionales y a la buena vecindad”.

López Obrador lamentó que hasta ahora no se haya dado respuesta a la nota diplomática sobre el financiamiento a esta organización –presidida por uno de sus principales opositores y detractores, el empresario Claudio X. González—, y consideró que ni a Estados Unidos ni a nadie le conviente ese tipo de acciones.

Pues sin autoridad moral ni política, éste y otros grupos “siguen financiando campañas en contra de nuestro gobierno que se constituyó de manera democrática, por voluntad de nuestro pueblo, es un gobierno legal, legítimamente constituido, esa es una práctica que no corresponde a los nuevos tiempos, es parte de la decadencia mundial el no llevar a cabo una reforma, una transformación, un cambio verdadero no sólo al interior de los países, sino en el comportamiento de las naciones en el ámbito internacional”.

El mandatario mexicano confió en que esto se transforme, pues inclusive el “intervencionismo” estadunidense en el pasado se tradujo en golpes de Estado, intervenciones militares o con el movimiento y caídas de gobiernos “al antojo de gobiernos extranjeros de las hegemonías”, se daba el espionaje, “pero todavía quedan polvos de aquellos lodos”.

Y ejemplo de ello, dijo, es que durante el sexenio de Felipe Calderón se permitió el operativo conocido como Rápido y Furioso –con el que Washington introdujo con aval del gobierno mexicano miles de armas con la intención de rastrearlas, pero no funcionó y sólo permitió dar capacidad de fuego al crimen organizado—, esto, dijo López Obrador, fue “una violación flagrante a nuestra soberanía, claro permitido por los gobiernos peleles”.

Insistió que sin pelarse o confrontarse, se puede hacer valer la soberanía de México. “Hablando con claridad, con respeto y sin gritos, despacio, ni siquiera a hay que hablar de corrido”.