Única oradora en la reapertura del recinto legislativo del Palacio Nacional, la presidenta del Senado, Olga Sánchez Cordero evocó que desde este sitio se consolidaron las primeras dos grandes transformaciones del país como primeros pasos del México independiente. En la actualidad, dijo, al igual que hicieron los liberales entonces para evitar que la reacción revocara los avances, el presidente Andrés Manuel López Obrador avanza en consolidar esta nueva transformación del país.
GALERÍA: Reinauguran el Recinto Parlamentario en Palacio Nacional
Con la presencia del mandatario, su esposa Beatriz Gutiérrez Müller y los tres aspirantes a sucederlo, Marcelo Ebrard, Adán Augusto López y Claudia Sheimbaun, la senadora hizo una larga remembranza de la importancia del recinto hasta que dejó de funcionar después de un incendio ocurrido a las pocas semanas de la muerte del presidente Benito Juárez.
Citó a Francisco Zarco como uno de los liberales que en su momento reconoció la importancia de consolidar los cambios: “si un dia resucita la reacción e intentara destruir estos hechos, para ese caso, que es remoto, porque el país ha progresado en la adhesión a la libertad y los elementos de la reacción cada día están más débiles. Si nos mantenemos firmemente unidos, dejaremos realizadas las reformas, derechos consumados, que no puedan destruir esta revolución”.
Sánchez Cordero dijo que en la actualidad la salud de la democracia depende hoy en gran medida de la intensa y benéfica colaboración entre los poderes públicos. Es necesario apostar colaboración entre poderes e instituciones, aprendiendo de las generaciones del siglo XIX donde las disputas y divisiones propiciaron las grandes catástrofes del país. Es tiempo de seguir dando pasos en el desarrollo de las instituciones, pasos que garanticen no tener retroceso en progresividad de derechos y justicia social, sigamos avanzando en la cuarta transformación de la República.
El recinto, creado en 1829, representó el segundo lugar que se convirtió en la sede de la Cámara de Diputados (el primer sitio donde sesionó fue la iglesia de San Pedro y San Pablo) y es fue el primer edificio creado específicamente para albergar a dicho órgano legislativo. En ese momento, en Palacio Nacional se encontraban instalados los tres Poderes de la Unión.
Cuenta con una variedad de símbolos como el ojo de Dios, que se encuentra dentro de un triángulo y con un gran resplandor. “Simboliza la vigilancia divina, es un símbolo de origen cristiano, católico, que en muchas iglesias lo van a ver frecuentemente. A fines del siglo XVIII y principios del XIX, con los movimientos independentistas y el cuestionamiento a la legitimidad de las monarquías, vamos a ver el ojo en muchos documentos”, relató Carmen Saucedo, historiadora de la Conservaduría de Palacio Nacional.
Además, sobre el espacio principal del orador, se encuentra el gorro frigio, de una tradición antigua y que era usado por los esclavos el día de su liberación. Los franceses y estadunidenses los retoman en su simbología libertaria, y que en Latinoamérica se popularizó en varias monedas en lugar de la imagen del rey.
En el recinto parlamentario se juró la Constitución de 1857, y el 22 de agosto de 1872 se incendió. Se relata que fue a causa del descuido de plomeros que trabajaban en el lugar y quienes dejaron prendido un brasero después de comer, agregó
Adriana Castillo, directora general de promoción cultural, acervo patrimonial y de la conservaduría de Palacio Nacional, explicó que el nuevo recinto es una réplica concluida en 1972, reconstruida a partir de una litografía pintada por Pedro Gualdi.
Aunque se buscó retomar la mayor similitud con el espacio original, sus dimensiones son mucho más pequeñas.
En los últimos gobiernos, dijo, el lugar se había dejado en abandono al igual que el recinto a Juárez y los cuales “se estaban cayendo”. Fue en la presente administración cuando desde septiembre de 2020 se inició su recuperación. Para ello se invirtieron alrededor de 46 millones de pesos para ambos espacios. Aclaró que aún no se ha definido su posible apertura al público.
