Washington. El número de estadunidenses que presentó nuevas solicitudes de subsidios por desempleo descendió la semana pasada y los datos del periodo anterior se revisaron a la baja, lo que sugiere que las condiciones del mercado laboral siguen siendo ajustadas, aunque el aumento de las tasas de interés está frenando el impulso.

El informe semanal de solicitudes de subsidio por desempleo publicado por el Departamento de Trabajo el jueves se sumó a la fuerte producción industrial de julio y al crecimiento subyacente de las ventas minoristas para disipar los temores de que la economía esté en recesión.

El informe de pedidos de subsidios por desempleo, el dato más oportuno sobre la salud de la economía, podría dar a la Reserva Federal (Fed) munición para llevar a cabo otra fuerte subida de tasas el próximo mes.

“Los temores de despidos generalizados aún no se han materializado”, dijo Mahir Rasheed, economista estadunidense de Oxford Economics en Nueva York.

“Aun así, dudamos que las solicitudes se aceleren bruscamente, ya que la demanda de mano de obra sigue estando muy por encima de la oferta de trabajo, mientras que las perspectivas de la economía siguen siendo relativamente positivas a pesar de la elevada incertidumbre sobre la inflación y el crecimiento”.

Las solicitudes iniciales de subsidios de desempleo estatales disminuyeron en dos mil, a una cifra desestacionalizada de 250 mil, en la semana terminada el 13 de agosto.

Los datos de la semana anterior se revisaron para mostrar 10 mil solicitudes menos de las que se habían comunicado anteriormente. Los economistas encuestados por Reuters habían previsto 265 mil solicitudes para la última semana.

La fuerte revisión y el modesto descenso de la semana pasada situaron las solicitudes muy por debajo del rango de 270 mil-300 mil que, según los economistas, indicaría una desaceleración importante del mercado laboral.

Las solicitudes no ajustadas cayeron en cuatro mil 536 a 191 mil 834 la semana pasada. Un aumento de las solicitudes en Massachusetts se vio compensado por notables descensos en California, Ohio, Texas y Georgia.

Las empresas de los sectores de la vivienda y la tecnología, sensibles a las tasas de interés, han estado despidiendo trabajadores en respuesta a la desaceleración de la demanda provocada por la agresiva campaña de endurecimiento de la política monetaria de la Fed para controlar la inflación.

En otros sectores, sin embargo, las empresas están ávidas de trabajadores. A finales de junio había 10.7 millones de puestos de trabajo vacantes, con 1.8 vacantes por cada trabajador desempleado.

El mercado espera que el banco central estadunidense suba su tasa de interés oficial entre 50 y 75 puntos básicos el mes que viene. La Fed ha subido su tasa en 225 puntos básicos desde marzo.

Las minutas de la reunión de política monetaria de los días 26 y 27 de julio, publicadas el miércoles, mostraron que, aunque los funcionarios de la Fed “observaron que el mercado laboral seguía siendo fuerte”, muchos de ellos también señalaron que “había algunas señales tentativas de una perspectiva de debilitamiento del mercado laboral”.