Ciudad de México. La Arquidiócesis Primada de México informó que a partir del próximo domingo 4 de septiembre, 16 diócesis de la Ciudad de México y área conurbada levantarán la suspensión del precepto de la misa dominical y modificarán la forma de recibir la comunión en misa, la cual será en la boca o en la mano, “conforme lo soliciten los fieles, cuidando en ambas modalidades el profundo respeto a la Sagrada Eucaristía y la oportuna prudencia sanitaria”.
En un comunicado firmado por las 16 diócesis agrupadas en las tres provincias eclesiásticas de México, Tlalnepantla y Toluca, se informó que las personas mayores y quienes se encuentren enfermos, así como quienes los cuidan, están dispensadas de este precepto.
“Los protocolos de salud para reducir el contagio de covid-19 han sido asumidos con responsabilidad por las comunidades parroquiales, comprometidas en cuidar la salud, en una cultura de prevención y de respeto a la dignidad de cada persona. La normativa de la Iglesia no tiene otro propósito que puntualizar, de manera vinculante, la grandeza de la celebración de la Santa Misa.
“Ahora, que lo más difícil de la pandemia ha pasado, que el acceso a la vacuna se ha ampliado y que las actividades han vuelto a la normalidad, hemos acordado y decidido que se retome el precepto de la Santa Misa dominical y de las demás solemnidades prescritas en el Derecho de la Iglesia”.
Por ello, las diócesis, exhortaron a los sacerdotes que acompañen y orienten a los fieles a vivir y revalorar “la Santa Misa” como centro y raíz de la vida cristiana.