San Juan. Una cantidad récord de algas asfixia las costas caribeñas, desde Puerto Rico hasta Barbados, con toneladas de sargazo marrón que matan la vida silvestre, afectan el turismo y liberan gases tóxicos.
Más de 24 millones de toneladas de sargazo oscurecieron el Atlántico en junio, comparado con los 18,8 millones de toneladas de mayo, según un informe mensual del Optical Oceanography Lab de la Universidad de la Florida, que describió esa cifra como “un récord histórico”.
En julio no mermaron las algas en el mar Caribe, de acuerdo con Chuanmin Hu, profesor de oceanografía óptica que colabora en esos informes.
“Me asusté”, dijo Hu al recordar lo que sintió al ver las estadísticas de junio. Indicó que eran un 20 por ciento más altas que el récord previo, fijado en mayo del 2018.
Hu recopiló más información para la Associated Press, según la cual la acumulación de sargazo en el Caribe oriental alcanzó niveles casi récord este año, superados solo por los de julio del 2018. Los niveles de algas en el norte del Caribe son los terceros más altos jamás registrados, inferiores solo a los de julio del 2018 y julio del 2021.
Los científicos dicen que hay que investigar más a fondo las razones por las que los niveles de sargazo son tan altos, aunque el Programa Ambiental Caribeño de las Naciones Unidas indica que entre los posibles factores figuran un aumento en la temperatura del agua como consecuencia del cambio climático, así como fertilizantes llenos de nitrógeno y aguas residuales que alimentan la reproducción del sargazo.
“Este año fue el peor de que tengamos registros”, expresó Lisa Krimsky, investigadora de la Universidad de la Florida. “Es algo muy devastador para la región”.
Agregó que grandes masas de sargazo tienen un fuerte impacto ambiental. Las algas en descomposición alteran la temperatura del agua y el equilibrio del pH, además de reducir las poblaciones de hierbas marinas, arrecifes de corales y esponjas.