El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, se reunió anoche, en Lima, con el presidente de Perú, Pedro Castillo, en lo que representó la primera parada de una gira por Sudamérica.
En la conversación celebrada en el Palacio de Gobierno del Perú, Ebrard transmitió al presidente Castillo los saludos y el cariño del presidente Andrés Manuel López Obrador hacia su persona y el pueblo peruano.
El canciller Ebrard invitó al presidente Castillo a participar en la Cumbre de la Alianza del Pacífico –mecanismo de integración económica compuesto por México, Perú, Chile y Colombia– que se celebrará en noviembre en territorio mexicano.
Tras su sesión privada, el presidente Castillo y el secretario Ebrard encabezaron una reunión de trabajo con empresarios de ambos países, en la que se acordó incrementar el turismo, la inversión y el comercio entre las dos naciones.
El canciller mexicano dijo que Perú ha mostrado ser una tierra propicia para la internacionalización de las empresas mexicanas.
La inversión de las compañías establecidas en Perú ronda los 16 mil millones de dólares y emplea a miles de personas en rubros como telecomunicaciones, industria farmacéutica, alimentos, minería, servicios financieros y seguros.
Este jueves, el canciller Ebrard arriba a Bolivia, donde tendrá tres días de actividades en las ciudades de La Paz, Uyuni y Sucre. Sostendrá encuentros con el presidente Luis Alberto Arce, con el vicepresidente David Choquehuanca y el ministro de Relaciones Exteriores, Rogelio Mayta.
El viernes viajará a el Salar de Uyuni, la mayor reserva de litio tipo salmuera en el mundo, donde hará un recorrido por la Planta de Yacimientos de Litio Bolivianos. Esta visita tiene como propósito impulsar la colaboración entre ambos países en la materia, y conocer de primera mano la experiencia boliviana para la exploración y explotación de este mineral.
El sábado, Ebrard participará como invitado de honor en las actividades conmemorativas del 197 Aniversario de la Independencia del Estado Plurinacional de Bolivia.
Después irá a Colombia, donde el domingo participará en la ceremonia de toma de posesión de Gustavo como presidente y tendrá con él una reunión privada para identificar las prioridades que habrán de impulsar ambos países en la relación bilateral.
