Acapulco, Gro. Pese a la advertencia oficial de playas sucias en Acapulco, este puerto guerrerense superó el martes 68 por ciento de ocupación hotelera, según cifras de la Secretaría de Turismo estatal.

El lunes, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) anunció que tres playas de Acapulco, Hornos, Suave y Manzanillo, no son aptas para para uso recreativo debido a que superan el número permitido de enterococos.

La dependencia indicó que previo al inicio de las vacaciones de verano, 98.96 por ciento de las playas de todo el país cumplen los lineamientos de seguridad establecidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS), por lo que se consideran aptas para uso recreativo.

Especificó que en coordinación con autoridades sanitarias estatales y la Red Nacional de Laboratorios de Salud Pública, se analizaron 2 mil 98 muestras de agua de mar en 290 playas, de 75 destinos turísticos en los 17 estados costeros del país.

El análisis arrojó que 287 playas son aptas para uso recreativo, mientras que las playas Hornos, Suave y Manzanillo de Acapulco, rebasaron los límites establecidos de 200 enterococos en 100 mililitros de agua.

En Playa Hornos se registraron 292 enterococos en 100 mililitros de agua; en playa Suave se registraron 241 enterococos en 100 mililitros de agua; y en playa Manzanillo se detectaron 373 enterococos en 100 mililitros de agua, cuando el límite recomendado por la OMS son 200 enterococos.

Otras playas de Acapulco estuvieron cerca de rebasar dicho límite, Caleta registró 193 enterococos en 100 mililitros de agua, playa Icacos 1, 199 enterococos, y playa Icacos 142 enterococos por cada 100 mililitros de agua.

No obstante, bañistas acudieron normalmente a disfrutar de las playas durante el lunes.

En Manzanillo, en la zona Tradicional, la más sucia del país según Cofepris, donde se observó una descarga desde la avenida Costera, un grupo reducido de familias retozaba en la orilla del mar.

Lo mismo ocurrió en las playas Suave y Hornos, en las inmediaciones de donde desemboca en el canal de Aguas Blancas, también en la zona Tradicional de Acapulco.

A lo largo de playa Hornos se observó la afluencia considerada como normal en temporada de verano, no obstante que el mal olor impera en las cercanías a la desembocadura del canal de Aguas Blancas.

Por su parte, la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Acapulco (Capama), señaló que los resultados anunciados el lunes por la Cofepris sobre el muestreo en playas del país, no son permanentes.

La Capama señaló que los análisis fueron realizados entre el 7 y el 20 de julio pasado, pero advierte que “las condiciones podrían variar y no se trata de un resultado permanente. Lo cual, no obstante, no exime que sean un indicador a tomar en cuenta, que obliga a actuar en consecuencia”.

La paramunicipal puntualizó que realiza de manera permanente un plan de vigilancia y respuesta inmediata en las playas, con la finalidad de detectar posibles descargas fortuitas en arroyos o canales pluviales, para canalizarlas al drenaje sanitario, así como clorar las aguas residuales.

Resaltó que se trabaja con autoridades estatales y federales, y en fechas recientes se logró una inversión superior a 415 millones de pesos, para atender la red hidrosanitaria del anfiteatro de Acapulco.

Además de que con recursos internacionales se atenderá la problemática de alcantarillado sanitario en colonias del valle de la Sabana, así como el tratamiento de aguas residuales, y con ello prevenir la contaminación en el ecosistema del río de la Sabana, la laguna de Tres Palos y la laguna Negra de Puerto Marqués.

Por separado, el oceanólogo Efrén García Villalvazo, consideró que las playas que no son aptas para uso recreativo deben ser cerradas para protección de los turistas, como ocurre en otras ciudades del mundo, en lo que se corrige la situación.

Insistió que “se trata de proteger al turismo, no de lastimar a nadie, ni de afectar prestigios”.

Señaló que parte de la responsabilidad del vertimiento de aguas residuales a la bahía de Acapulco, es de la población, pues personas que habitan en partes altas conectan sus drenajes de forma clandestina a los canales pluviales, a lo que contribuye que autoridades no aplican el marco jurídico, pues ello representa un delito que debe ser castigado.

García Villalvazo subrayó la importancia de que la ciudadanía se involucre en temas ambientales.

Mencionó que “no solo se trata de las descargas a la bahía, podemos ver que hay basura en cada esquina, en las calles, la gente empieza a hacer los montones de desechos, nos estamos acostumbrando, pero tenemos que salir del letargo, nos preocupamos cuando se ve afectada la imagen turística”.

Por último, criticó que ambientalistas de Acapulco no fueron convocados por autoridades municipales a elaborar el Programa de Ordenamiento Ecológico Territorial.

Lamentó que “no fuimos convocadas las organizaciones ambientalistas, cuando somos los que podemos aportar, los que conocemos el entorno local”.