Ciudad de México. Las investigaciones de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México en torno a Luis Vizcaíno Carmona, ex director Jurídico y de Gobierno en la entonces delegación Benito Juárez, apuntan a que formaba parte de una red de corrupción junto con otros ex funcionarios de la demarcación, señaló la jefa de Gobierno capitalino, Claudia Sheinbaum Pardo.

Dijo que el modus operandi consistía en que se otorgaban permisos para construcciones o permitían construir más niveles a cambio de departamentos para los servidores públicos involucrados, de tal manera que se han encontrado 39 departamentos en Benito Juárez a nombre del citado ex servidor público, por lo que se le investiga por presunto enriquecimiento ilícito.

La titular del Ejecutivo local negó que este caso tenga tintes políticos y aseguró que la investigación deriva de denuncias vecinales, así como de la indagatoria que se inició por la explosión ocurrida el 16 de agosto del año pasado en un edificio de la colonia Acacias, en el que varios departamentos están a nombre de ex servidores públicos de Benito Juárez, gobernada por el Partido Acción Nacional.

A Luis Vizcaíno se le señala de favorecer y obedecer a presiones de constructoras para realizar desalojos violentos y posibles extorsiones; también se presume que, junto con otros ex funcionarios, es copropietario de distintos inmuebles, como un edificio ubicado en la colonia Guadalupe Inn con valor de más de 30 millones de pesos.

Ante esta situación, la bancada de Morena en el Congreso de la Ciudad de México busca crear una comisión especial que investigue los posibles actos de corrupción entre ex funcionarios de la entonces delegación Benito Juárez y el llamado cártel inmobiliario.

La lideresa del grupo parlamentario, Martha Ávila Ventura, calificó de preocupantes los indicios de corrupción en el sector inmobiliario en la demarcación que gobierna el panista Santiago Taboada, que podría revelar toda una red de corrupción que posiblemente se instaló en la administración cuando gobernaban Christian von Roehrich y Jorge Romero, actual diputado federal.