Washington. La mayoría del Senado de Estados Unidos respaldó el miércoles una amplia legislación para subvencionar la industria nacional de semiconductores, con la esperanza de impulsar a las empresas en su competencia con China y aliviar la persistente escasez que ha afectado a sectores que van desde los automóviles a las lavadoras.
En la votación, el Senado aprobó el proyecto de ley por 57 votos a favor y 31 en contra, superando los 51 votos necesarios. Se espera que la Cámara de Representantes lo avale esta misma semana y lo envíe al presidente Joe Biden para que lo firme.
La tan esperada ley “Chips y Ciencia” prevé unos 52 mil millones de dólares en subvenciones gubernamentales para la producción de semiconductores en Estados Unidos, así como una bonificación fiscal a la inversión en plantas de chips cuyo valor se estima en 24 mil millones de dólares.
La ley también autorizaría más de 170 mil millones de dólares a lo largo de cinco años para impulsar los esfuerzos de investigación científica de Estados Unidos para competir mejor con China. El Congreso tendría que aprobar una ley de asignaciones separada para financiar esas inversiones.
“Esta legislación va a crear puestos de trabajo bien remunerados, aliviará las cadenas de suministro, ayudará a reducir los costos y protegerá los intereses de seguridad nacional de Estados Unidos”, dijo el líder de la mayoría demócrata del Senado, Chuck Schumer, instando a apoyar el proyecto de ley.
Se espera que la mayor parte de los fondos aprobados el miércoles se destinen a financiar nuevas fábricas, pero éstas tardarán dos o tres años en completarse una vez que comience su construcción. Boeing dijo el miércoles que todavía se enfrenta a problemas en la cadena de suministro por la escasez de chips.
General Motors señaló el martes que tenía más de 90 mil vehículos sin terminar, en su mayoría camiones y SUV de alto margen, a la espera de chips y otras piezas. Miles están detenidos en el sureste de Michigan.