Lima. Un ex asesor del presidente peruano Pedro Castillo, que estaba prófugo en medio de pesquisas de presunto tráfico de influencias en el entorno del mandatario, se entregó a la justicia, dijo el martes la fiscal general, que anunció que no cederá a presiones políticas ni mediáticas en la lucha contra la corrupción.
Bruno Pacheco, quien fuera secretario general del despacho presidencial de Castillo, permanece bajo custodia de un equipo especial anticorrupción de la policía desde el sábado cuando se puso en contacto con la fiscalía, según el organismo judicial.
"Quiero anunciar a todos los peruanos que el señor Bruno Pacheco se ha entregado a la justicia", dijo la fiscal general Patricia Benavides, en un discurso público durante una ceremonia previa a las fiestas de la Independencia de Perú esta semana.
No fue posible contactar al abogado de Pacheco, quien estaba prófugo desde hace casi cuatro meses y que anteriormente ha negado las acusaciones.
En noviembre del año pasado tras un operativo autorizado, fiscales encontraron 20.000 dólares en el baño de la oficina de Pacheco, en Palacio de Gobierno, en el marco de una investigación sobre presunta injerencia del Gobierno en el ascenso de oficiales de alto rango en las Fuerzas Armadas.
El presidente Castillo, que está incluido en la investigación y en otras sobre supuesta corrupción en el Gobierno, ha rechazado las acusaciones en su contra.
El mandatario, en un mensaje por Twitter, saludó la captura de su exasesor. "Para mi gobierno es satisfactorio que el señor Bruno Pacheco se haya puesto a disposición de la justicia. Eso evidencia la falsedad sobre la supuesta protección del Ejecutivo, esperamos que se imponga la verdad".
Benavides manifestó que pronto informará acerca del resultado de las investigaciones e invocó "a los demás investigados a que colaboren con la justicia". En la tarea contra la corrupción no habrá "intocables", sentenció.
"No cederemos un milímetro en esta lucha (contra la corrupción), a nosotros no nos motiva intereses ni presiones políticas, mediáticos ni económicas", afirmó en un tono enérgico ante funcionarios de la fiscalía local.
La fiscalía ya investiga a Castillo por presunto delito de encubrimiento personal tras la denuncia de uno de sus exministros de que el presidente trató de bloquear los planes de captura de implicados en supuestos actos corrupción.
El denunciante exministro de Interior Mariano González había conformado un equipo especial de la policía para capturar a los implicados en una trama de corrupción en la concesión de obras públicas, entre ellos un exministro, un sobrino del presidente Castillo y el exesesor presidencial Pacheco.
Al igual que la fiscalía, el Congreso también investiga a Castillo y varios legisladores de oposición han anunciado tras la denuncia del exministro de Interior que planean alistar una moción para iniciar un nuevo juicio político contra el presidente, que ya sobrevivió a dos intentos de destitución.
Para destituir a Castillo, un exsindicalista de izquierda y profesor rural, se requieren más de 87 votos de los 130 en el Congreso, algo improbable en estos momentos, según analistas.
Castillo cumplirá a fines de mes un año de gestión y espera el 28 de julio dar un discurso ante el Congreso unicameral.
