Querétaro, Qro. Un menor de seis años está acusado de violación equiparada en detrimento de otros dos niños de cuatro años. La agresión sexual fue detectada por la abuela de las víctimas siete meses después de ocurrida, y aunque los niños ya lo habían señalado no fue atendido por la institución de educación básica privada, cuyo nombre no fue revelado por la secrecía de la investigación.

Los niños víctimas de la agresión sexual fueron retirados de la institución escolar por sus padres, mientras continúan las investigaciones y además de enfrentar el presunto abuso, son discriminados porque no son aceptados en otras escuelas para que puedan continuar con sus estudios de nivel preescolar.

El 10 de junio pasado, uno de los menores refirió a su abuela que le dolía la “colita”. Mientras lo bañaba detectó que su nieto presentaba lesiones en la zona rectal. Para luego conocer que otro de sus nietos se encontraba en circunstancias similares.

Los dos niños, que son primos, recibieron atención médica en el Hospital del Niño y la Mujer, por lo que los padres sus padres presentaron la denuncia penal ante la Fiscalía General de la entidad (FGE) la cual, tras la investigación respectiva, detectaron que desde noviembre de 2021 el presunto agresor, de seis años de edad, les había “picado la parte trasera” con un objeto.

Uno de los chicos agredidos habla de forma fluida y el otro aún no por su corta edad, pero su declaración es coincidente en el sentido que otro niño que está en la primaria de la misma escuela los molestaba.

La violencia fue gradual, primero los golpeaban, luego los desnudaba junto con otros niños hasta que ocurrió la violación de forma equiparada y aunque las víctimas informaron de lo sucedido a una maestra y al profesor de educación física, estos no tomaron acciones, narró el abogado Ernesto Carreño Franco en entrevista con La Jornada.

También, relató que otro padre de familia de la misma institución educativa reportó la localización de una revista presuntamente para adultos, pues la descripción que realizaron los niños fue que en la imagen había una mujer a la que se le veía los glúteos y un hombre estaba encima de ella. “¿Cómo se hizo para que esa revista ingresara al colegio?”, cuestionó.

La FGE ya concluyó la investigación y se declaró incompetente para imputar al niño de seis años, pues por ley le corresponde a la Procuraduría de Protección de niñas, niños y adolescentes que depende del sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF).

Los niños menores a los 12 años son imputables por su corta edad, sin embargo, eso no quiere decir que el delito por violación equiparada quede impune, explicó el abogado, pues será la Procuraduría la que determine sobre la restitución del daño ocasionado a las dos víctimas, y que el menor acusado reciba tratamiento para que no continúe o vuelva a incurrir en la misma conducta ilícita.

Será también la Procuraduría la que, tras investigar, determine cuáles fueron los motivos que llevó al niño de seis años a incurrir en esa acción. Aunque para el abogado al citar a peritos en psicología, cuando un infante incurre en esas acciones es porque lo vio o porque lo vivió al ser víctima de una posible agresión sexual que replicó en sus compañeros de escuela sin saber que se trata de una conducta ilícita.

Los abogados que atienden este caso y el de otro menor que fue quemado por su compañero de salón en la secundaria, quien le roció alcohol y le prendió fuego, analizan demandar por la vía civil a la institución educativa por la omisión de actuar en consecuencia cuando los niños denunciaron lo ocurrido.

Casos similares

Para el abogado que lleva el caso de los dos niños de cuatro años, no se trata de casos aislados, pues en Querétaro se sabe de la existencia de otros donde están involucrados adultos que presuntamente violentan sexualmente a menores de edad, que va desde masturbarse ante ellos o de que el maestro incurrió en supuestos tocamientos, pero existe temor por parte de los padres de familia de darlo a conocer para no “hacer más grande este asunto” o no cuentan con acompañamiento legal para atender los casos.

Hasta julio pasado en Querétaro había mil 191 casos registrados de delitos contra la libertad y la seguridad sexual; de esa cifra, 410 son de abuso sexual y 154 de violación equiparada.