Xalapa, Ver. Los cuerpos de los hermanos Yair y Giovanni Valencia Olivares, y su primo Misael Olivares Jiménez llegaron a las 23:40 horas del miércoles a San Marcos Atexquilapan, en Naolinco, de donde eran originarios, 17 días después de perder la vida en el interior de un tráiler abandonado en Texas.
Familiares y amigos de los tres jóvenes recibieron sus restos en la entrada del pueblo, y los escoltaron hasta su casa, donde los esperaban con un altar, del que sobresalían fotografías, balones de futbol y veladoras para honrar sus vidas.
“Somos un pueblo unido, que se apoya en las fiestas y en el dolor y aquí estamos acompañando a la familia de Yair, Giovanni y Misael”, comentó uno de los asistentes.
Meses atrás, los hermanos Yair y Giovanni Valencia, de 19 y 16 años, y su primo Misael Olivares, de 16 años, se cansaron de elaborar zapatos en el taller de la familia —un trabajo duro por el que se paga poco— y comenzaron a hablar de irse a Estados Unidos.
Después de tres meses de hacer labor de convencimiento, sus familias les otorgaron el permiso, los ayudaron a reunir 200 mil pesos por cada uno y les pagaron el viaje con miras a Estados Unidos.
Los jóvenes habían planeado llegar con unos parientes en San Antonio, Texas, conseguir algún trabajo en el sector de la construcción, y reunir dinero para ayudar a la familia, que tenía complicaciones económicas a partir de la pandemia.
Pero las alertas en la familia de los jóvenes se encendieron desde el lunes 27 de junio cuando dejaron de recibir mensajes de los jóvenes y se conoció del hallazgo de un tráiler en San Antonio, Texas, con 53 migrantes muertos.
Unos días después, las autoridades confirmaron que los tres jóvenes naolinqueños se encontraban entre los migrantes muertos en el vehículo. Luego del proceso de identificación y los trámites de repatriación, la noche del miércoles sus restos llegaron a su natal San Marcos Atexquilapan, en Naolinco.
El sepelio se realizará el viernes a las 15:00 horas, después de ser velados por familiares y amigos.