Madrid. Tras el despliegue inicial el cuatro de julio, la nave espacial --un cubeSat enviado a estudiar una nueva órbita lunar para la futura estación Gateway-- desplegó con éxito paneles solares, se estabilizó y comenzó a cargar su batería a bordo. El sistema de propulsión también se preparó para la primera maniobra de la nave espacial.
Capstone, del tamaño de un horno micro-ondas, hizo contacto inicial con la estación terrestre DSN (la Red de Espacio Profundo) en Madrid, seguido de un contacto parcial con la estación terrestre Goldstone en California. A partir de estos contactos, los operadores de la misión pudieron determinar la posición y velocidad aproximadas de Capstone en el espacio, pero la comunicación quedó entonces cortada.
Como resultado, la primera maniobra de corrección de trayectoria de Capstone, originalmente programada para la mañana del 5 de julio, se retrasó. Esta maniobra era la primera de una serie que está diseñada para hacer pequeñas correcciones para aumentar la precisión de la órbita de transferencia a la Luna, y la nave espacial quedó en la transferencia lunar balística general prevista mientras espera esta corrección de trayectoria.
Como resultado del trabajo de los equipos de la misión, la NASA informó este seis de julio en una actualización del blog que se había restablecido contacto con la nave. Se espera la reanudación de las maniobras para alcanzar su orbita lunar en un viaje previsto de cuatro meses.