Ciudad de México. El incremento en la tasa de referencia del Banco de México (BdeM) es positivo para las instituciones bancarias del país, pues tendrán mejores niveles de rentabilidad, afirmó la agencia calificadora de valores Moody’s.

“Una política monetaria más estricta beneficiará la rentabilidad de los bancos porque su gran grupo de depósitos de bajo costo mantendrá bajos los costos de financiación a medida que los préstamos comerciales se revalorizan de acuerdo con la tasa de referencia, beneficiando a los márgenes de interés netos”, dijo la agencia en un reporte.

Señaló que el aumento en la tasa de referencia permitirá efectivamente a los bancos revalorizar rápidamente sus préstamos principalmente a tasa variable a las empresas, que representan alrededor de la mitad del total de los préstamos del sistema.

El jueves, el banco central aplicó un alza sin precedentes en la tasa de fondeo de tres cuartos de punto porcentual, con lo que pasó de 7 a 7.75 por ciento. El objetivo de esta medida es contener los altos niveles de inflación que se tienen actualmente.

Moody’s expuso que desde mayo de 2021 a la fecha, el aumento acumulado en la tasa de referencia del BdeM es de 375 puntos base, lo que ha impulsado las carteras comerciales de las instituciones que prestan a empresas y la tasa promedio es de 7.97 por ciento actualmente, un aumento de 134 puntos desde abril del año pasado.

La agencia también anticipó que “los bancos cambiarán el precio de sus líneas de crédito al consumo y renovarán sus hipotecas residenciales de tasa fija a tasas más altas, con ambas clases de activos impulsando el crecimiento del crédito este año y el pasado”.

Así, expuso que la rentabilidad en los bancos con una amplia base de depósitos minoristas obtendrá un mayor impulso a partir de un período de tasas más altas. 

“Banco Azteca, Citibanamex, BBVA y Banorte tienen los menores y, por lo tanto, la combinación de fondeo más favorable, con una proporción considerable de depósitos a la vista y costos de fondeo muy por debajo de la tasa libre de riesgo a abril de 2022. Por el contrario, Scotiabank e Inbursa tienen una mayor participación de depósitos a plazo más caros y endeudamiento bancario, lo que implica mayores costos de financiamiento”, detalló.

De esta forma, Moody’s espera que las tasas activas continúen al alza en los próximos meses en el contexto de una inflación más alta por más tiempo y “un endurecimiento de la política monetaria que continuará mejorando los márgenes futuros de los bancos”.

Por otra parte, refirió, la implicación positiva también podría verse contrarrestada por el efecto negativo de la inflación sobre la renta disponible de los hogares, lo que afectará negativamente la capacidad de pago de los prestatarios y pesando sobre los activos productivos de los bancos. 

“Si bien seguimos viendo a los bancos en México bien preparados para manejar estas presiones, al mantener altos niveles de reservas para pérdidas crediticias, la calidad crediticia se deteriorará moderadamente más allá de 2022 en vista de un panorama económico desafiante para 2023”, externó. 

Y es que, la agencia espera un crecimiento económico débil en 2023 y más allá, por lo que el PIB no regresará a su nivel anterior a la pandemia potencialmente hasta 2024. 

“La dinámica de inversión modesta, el apoyo fiscal limitado para las empresas y la respuesta política menos predecible probablemente inhibirán los beneficios de la integración comercial con los Estados Unidos, las perspectivas de proximidad y el entorno actual de precios del petróleo”, añadió.