Ciudad de México. El presidente Andrés Manuel López Obrador rechazó que el incremento de ayer a 7.75 por ciento haya colocado a la tasa de interés de referencia del Banco de México como la más alta de los últimos años y enfatizó que cuando llegó al cargo, en diciembre de 2018, ese registro se ubicaba en 8.25 por ciento.

Asimismo, indicó que si bien la inflación en el país pasó de 7.6 en mayo a 7.88 por ciento en junio, sigue siendo menor que en Estados Unidos y Europa.

En la mañanera también dio a conocer que en su próxima visita a la Casa Blanca propondrá a su homólogo estadunidense, Jor Biden, un plan anti inflación conjunto que “beneficiará” a los pueblos de las dos naciones.

“Respeto la autonomía del Banco de México, pero como que ya deberían de pensar los técnicos en otra fórmula, porque no sólo son los técnicos del Banco de México, son los del (Departamento) Tesoro (de Estados Unidos), son todos los bancos centrales del mundo. Cuando hay inflación la fórmula es aumentar las tasas de interés, en todos lados, que significa eso: ‘para la economía y así ya no va a haber inflación’.

"Hay que buscar otras opciones y hay que regresar a la idea original de que los pueblos progresan fundamentalmente con producción, que eso es lo básico, producir, no apostar todo al mundo financiero, a la especulación. Se requiere impulsar la actividad productiva en todo el mundo”, planteó el mandatario en la mañanera, ante una pregunta sobre el aumento de las tasas de interés.

Respecto a lo dicho por los especialistas de que se trata del incremento en ese indicador más alto en las últimas dos décadas, López Obrador calificó esas expresiones de falsas. “¿Saben en cuánto estaban las tasas cuando llegamos nosotros al gobierno? En 8.5 por ciento”.

Al referirse a la inflación, el mandatario reconoció que si bien hubo un alza, el índice sigue en el país por debajo de otras naciones.

Para López Obrador es central que para contrarrestar esta situación es a través del impulso de la producción.

“Ahora que voy a Estados Unidos, que voy a tener una entrevista con el presidente Biden, le quiero hacer una propuesta para que conjuntamente, en la medida de nuestras posibilidades, podamos llevar a cabo un plan anti inflacionario conjunto. Les hablo de tres acciones: la primera, nos está funcionando muy bien, que es la que tiene que ver con energéticos, como está arriba el precio del petróleo crudo, los excedentes los estamos utilizando, inclusive no todos, para que no aumente el precio de gasolina y diésel y eso nos ayuda al mismo tiempo para controlar inflación”.

El segundo punto, dijo, es que se impulse la actividad productiva. En el caso de México, detalló, se ha creado un acuerdo con los grandes cadenas de distribución para mantener los precio de productos básicos, además que se ha concretado una política para generar el autoconsumo en la producción agrícola.

El presidente dejó en suspenso el tercer planteamiento, debido a que fue interrumpido, y sólo aseveró que “va a ser favorable. Vámonos despacio, porque si no se distorsionan las cosas, y es algo que va a ayudar a la gente en Estados Unidos y a nuestros paisanos mexicanos de aquí y de allá. Entonces vamos a esperarnos”, esto en una posible alusión a visas temporales de trabajo.