Ciudad de México. A pocos días de la 44 Marcha del Orgullo LGBTI+, Aurélien Guilabert, activista e integrante del Comité InclúyeT, señaló a La Jornada que en esta versión se dará visibilidad a las mujeres diversas, por lo cual ellas encabezarán la caminata del Ángel de la Independencia al Zócalo. Esta vez, después de dos años que no se convocó masivamente debido a la pandemia, la caminata será presencial, pero habrá también “formato híbrido”.
Este año “quienes encabezarán será un contingente de mujeres diversas, es la primera vez en la historia de la marcha; serán mujeres lesbianas, trans, bisexuales e intersex. Resaltando nuestro posicionamiento, contra cualquier discurso de odio o violencia machista. Es nuestra responsabilidad como movimiento ser transversal y sumarnos a lo que está pasando con la violencia de género”.
Aurélien Guilabert, detalló que previo al arranque de la marcha se leerá el posicionamiento político con las principales demandas de la comunidad LGBTI+, pues destacó que no todo es festivo. Entre las exigencias está “poner un alto a cualquier discurso de odio o violencia machista contra las mujeres diversas” y reconoció que incluso entre los feminismos “se ha armado una polémica, sobre todo por las mujeres trans”.
Recordó que “México es el segundo país en materia de crímenes de odio por orientación sexual en Latinoamérica, aún existe una situación de violencia muy fuerte” y agregó que “por primera vez este año el posicionamiento se entregará formalmente a los integrantes de la comisión de diversidad de la Cámara de Diputados, el próximo 28 de junio, “y lo mismo haremos con el gobierno de la Ciudad de México”.
Se prevé que esta manifestación, vuelva a ser tan numerosa como las previas al Covid-19, y es que además de los 150 automotores o carros alegóricos, irán integrantes de organizaciones civiles, contingentes de a pie, y a ello se suman la gente que va ver la marcha.
Detalló que, si alguno de los automotores “tiene marca”, es decir está avalado por alguna empresa, y sus productos, “nos ponemos en contacto con las marcas para conocer sus políticas de inclusión. En este caso el gobierno (de la Ciudad de México) decidió dividir el número de automotores por comité (son tres comités organizadores)”.
Por ningún carro se cobrará. “Nos hemos enterado que algunas personas de otros comités estaban cobrando (por la promoción de las marcas), y no estamos de acuerdo con que se lucre con la marcha. Incluso ninguno de los integrantes del comité recibe dinero por el trabajo de organización; es totalmente voluntario”.
Desde 2019, se ha promovido que las marcas que participen, apoyen a organizaciones civiles, “así se logró apoyar a comedores comunitarios, refugios y a trabajadoras sexuales. Esperamos que este año, las marcas se alineen y no solo vayan a poner su marca en Reforma”.