Ciudad de México. La selección mexicana Sub-23 de beisbol se llevó la medalla de oro en el Premundial de la categoría al derrotar 4-0 a Cuba en el estadio Alberto Romo Chávez, casa de los Rieleros de Aguascalientes. Aunque tenía asegurado el boleto para la Copa del Mundo en China, Taipéi, en octubre de este año, luchó con ahínco por conseguir el título ante un rival de gran tradición pelotera.

Un pase y una presea que logran de manera indiscutible al vencer en la final después de avanzar con paso perfecto en el torneo, con triunfos en ocho partidos. Cerró la ronda preliminar con victorias sobre Nicaragua (11-0), Argentina (18-3), Guatemala( 21-1), Venezuela (14-0), Puerto Rico (2-1) y Cuba (3-0).

En la ronda semifinal derrotó de nuevo a los venezolanos por 5-0 y volvió a vencer a Cuba por el oro.

El último out siempre va cargado de drama. El lanzador mexicano Néstor Anguamea tenía dos outs y tres bolas en la entrada final. El bateador cubano conectó un roletazo, pero el primera base estiró su cuerpo para atrapar la pelota y culminar la victoria.

El trabajo de los tricolores fue bastante sólido. El abridor Jordan Suárez lanzó durante cinco entradas y un tercio, aceptó dos imparables de los cuatro que recibió la novena, concedió una base por bolas y ponchó a dos. Los relevos fueron Enrique Alanís y Anguamea.

En el turno al bateo Javier Sánchez, Carlos Pacheco y Cristopher Escarrega produjeron sendas carreras. El equipo que dirige Enrique Che Reyes se consagró como el más contundente del torneo.

Y el reconocimiento al Jugador Más Valioso del campeonato fue para el mexicano Héctor Mora, quién terminó puntero en carreras impulsadas, imparables, triples, promedio de bateo y timbradas.

El equipo anfitrión se lanzó al centro del diamante para festejar el triunfo. La selección cubana formó una fila y de manera deportiva felicitó a los vencedores.

El mánager de los cubanos, Amado Johnson, reconoció la entrega de sus peloteros, aunque el rival se impuso desde la primera entrada.

Estoy muy agradecido con lo que hicieron estos muchachos, pensamos que eran menos, pero se sobrepusieron, dijo el mánager; México siempre fue mejor de principio a fin del campeonato. Hicimos lo que teníamos, pero no alcanzó. Estoy contento con la medalla de plata, aunque queríamos más, es normal.

Al analizar qué pudo fallar en un partido donde los mexicanos conectaron ocho imparables, mientras Cuba sólo pegó cuatro, Johnson evaluó: La defensa es uno de los pilares del equipo, pero esta vez no funcionó. Además bateamos muy poco, los muchachos querían dar mucho más pero simplemente no se pudo.

El capitán del equipo de la isla, Andrys Pérez, admitió que carecieron de la fuerza que suelen expresar y garra para revertir la superioridad de los tricolores.

El duelo por el bronce fue un partido muy cerrado entre Nicaragua, ganadora del tercer lugar por 4-3, y Venezuela. Ambos equipos acudirán a la Copa Mundial en octubre.