Quito. El líder indígena ecuatoriano Leonidas Iza fue liberado de su detención por una orden judicial, pero los cabecillas de las protestas dijeron el miércoles que su liberación no pondría fin a las manifestaciones contra las políticas económicas del presidente conservador Guillermo Lasso.

Iza quedó en libertad a última hora del martes tras un dictamen de una jueza de la ciudad de Latacunga. Estuvo detenido durante unas 24 horas, luego de que el gobierno dijera que lideró bloqueos de carreteras y otros actos supuestamente violentos que paralizaron los servicios públicos.

El abogado de Iza calificó la detención como ilegal, pero el gobierno ha dicho que será juzgado.

Las vías de acceso al norte y al sur de la capital Quito han sido bloqueadas desde el lunes por manifestantes que exigen que Lasso congele el precio de la gasolina, declare una moratoria sobre las deudas bancarias de los pequeños agricultores y limite la expansión petrolera y minera.

Los indígenas han dicho que las protestas, que han estado marcadas por invasiones de campos petroleros, el incendio de vehículos policiales y la detención de algunos policías por parte de los manifestantes, serán indefinidas.

"No fue capricho (de Iza) convocar a esta movilización. Fue porque los ecuatorianos sienten el alto costo de la vida", dijo el presidente de la organización indígena Ecuarunari, Carlos Sucuzhañay, a un medio local. "Queremos que el señor presidente se reoriente para trabajar en función de país".

La CONAIE, organización de Iza, escribió en Twitter que la protesta continuará pese a su liberación. Los dirigentes indígenas en la Amazonía, también aseguraron que se mantendrán en las carreteras.

"Esperamos que la racionalidad sea lo primero que se observe en estos grupos de protestas, en estas personas que lideran y muchas veces ejercen la violencia oculta que sucede", dijo el ministro del Interior, Patricio Carrillo.

Las protestas han dejado al menos 20 personas detenidas, según el gobierno.

Lasso ha dicho que el paro indígena está afectando a la reactivación económica del país y que aplicará la ley para castigar los actos vandálicos durante las manifestaciones.