Madrid. Unas horas después de que el presidente del gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, justificó en el Congreso de los Diputados su viraje en política exterior con respecto al conflicto del Sáhara Occidental, asumiendo como propia la postura de Marruecos, el gobierno de Argelia anunció en un comunidado la “suspensión inmediata” del Tratado de Amistad, Buena Vecindad y Cooperación entre ambos países y en vigor desde hace dos décadas. Esta medida, a la que hay que sumar la llamada a consultas de su embajador en Madrid desde marzo pasado, sitúa las relaciones diplomáticas al borde la ruptura.
El presidente español justificó lo que definió como “nueva etapa” en la política exterior española con respecto al Sáhara Occidental en que la vía de resolución del histórico conflicto pasa porque se reconozca la territorialidad de Marruecos en el Sáhara, como una especie de autonomía, pero vinculada al Estado alaui. Un viraje de 180 grados que trascendió por la filtración por parte del gobierno marroquí de una carta personal del mandatario español enviado al Rey Mohamed VI y que provocó a su vez esta nueva crisis diplomática.
El gobierno argelino, que ya anunció hace unos meses que mantendría los precios del gas a España mientras que a otros países había decidido rebajarlos y que en todo caso limitaría su venta y ya no sería el socio preferente, ahora además anunció una revisión profunda de sus contratos energéticos, bajo el argumento de que “las autoridades españolas han emprendido una campaña para justificar la posición que han adoptado sobre el Sáhara Occidental, una violación de sus obligaciones legales, morales y políticas como poder administrativo del territorio [saharaui] que pesan sobre el Reino de España”, según la versión oficial argelina difundida por un despacho de la agencia Efe.
A la reacción de Argelia, el presidente Sánchez escuchó en el Parlamento las críticas y el frontal rechazo a su viraje de todos los grupos parlamentarios, con la excepción de su propio partido, el PSOE. Incluso sus socios de gobierno, Unidas Podemos (UP), expresaron su malestar por un cambio de postura que ni siquiera contó con un debate parlamentaria ni el apoyo de las principales instituciones del Estado.
Hacienda investiga al rey emérito
El rey emérito español Juan Carlos de Borbón será de nuevo investigado en España, en este caso por un expediente que abrió el ministerio de Hacienda por un presunto delito fiscal relacionado con los regalos que habría recibido después del año 2014, cuando abdicó en favor de su hijo, el Rey Felipe VI, y perdió la condición de inviolabilidad. Según publica el diario El Mundo, la investigación pretende desentrañar las cacerías en las que participó y que fueron regaladas o donadas, sobre todo las que superaron los 120 mil euros (dos millones 600 mil pesos), que es cuando se podría abrir un expediente por delito fiscal. La indagatoria está en su fase inicial.