A pesar del avance en la conclusión del bachillerato entre la población de 20 a 24 años, al pasar de 44.6 a 58.6 por ciento entre 2010 y 2020, las brechas entre poblaciones de distinto ingreso “son todavía evidentes y, de mantenerse las condiciones actuales, tardaríamos casi tres decenios más en asegurar que todos los jóvenes tengan la educación media superior finalizada”, advierte la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (Mejoredu).

En el informe “Indicadores Nacionales de la Mejora Continua de la Educación de la Educación en México. Cifras del ciclo escolar 2019-2020”, señala que 64.3 por ciento de las personas de 20 a 24 años en condiciones de alto o muy alto rezago social, tienen la secundaria incompleta, mientras que sólo 31.4 por ciento logró concluir su educación media superior. En contraste, el porcentaje de quienes vivían en zonas de menor rezago social fue de 89.1 y de 59.8 por ciento, para cada nivel.

Agrega que en el caso de la población hablante de lengua indígena, el porcentaje de población de 20 a 24 años con al menos su educación básica completa fue de 67.2 por ciento, y un porcentaje menor, 60.1 por ciento, logran concluir su bachillerato.

Sin embargo, aún se encuentra por debajo de la población no hablante de una lengua indígena, pues entre 2010 y 2020 el porcentaje de población de 20 a 24 años con al menos la educación básica completa se incrementó de 78.3 a 88.1 por ciento, y de quienes terminaron la media superior, pasó de 44.6 a 58.6 por ciento.

La Mejoredu advierte que pese a los avances en la cobertura y conclusión de la educación básica y media superior, la población que logra cursar y concluir algún grado de la educación superior “es una fracción de aquella que concluye el bachillerato, así como este conjunto es sólo una parte de la población que termina la educación básica”.

En 2020, 23.2 por ciento de la población de 25 a 34 años concluyó una carrera, frente al 18.4 por ciento en 2010. “Aun así, 5 de cada cien personas ubicadas en zonas de alto y muy alto rezago social de entre 25 y 34 años tuvo al menos educación superior completa, mientras que la proporción de quienes viven en zonas con un rezago de medio a muy bajo fue de casi una de cada cuatro”.

Por lo que respecta a la tasa de analfabetismo, destacó que se ubica en 4.8 por ciento en población de 15 años y más, lo que representa una reducción frente al 6.7 por ciento reportado en 2010. Esta condición de rezago educativo grave, advierte la comisión, no se distribuye de forma homogénea, pues afecta más a los adultos de 55 a 64 años, mientras que entre los jóvenes de 15 a 24 años es de apenas 0.9 por ciento.