La Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México informó que la madrugada del viernes fue “rafagueado” el Centro de Conservación Ecoparc Colima, ubicado en el centro de la capital colimense, lo cual ocasionó la muerte de un ciervo rojo y un borrego mouflón.

Este centro para la conservación e investigación de la vida silvestre (CIVS), tiene el aval de la Semarnat, y su director, Jesús Acosta, informó que al llegar ese día a temprana hora a Ecoparc se encontraron varios casquillos esparcidos en todo el lugar y un ciervo rojo ya muerto desangrado a causa de dos balazos, al igual que el borrego.

Explicó que decenas de animales se encontraban muy alterados por la balacera y cada ejemplar es revisado minuciosamente para descartar que hayan sido rozados y lesionados de alguna forma por los disparos “que les tiraron sin piedad como si lo animales fueran parte de la imparable delincuencia organizada”.

En un comunicado la asociación indicó que el viernes al medio día las autoridades de Ecoparc interpusieron una denuncia penal en la Fiscalía General del Estado de Colima contra quienes resulten responsables de “este cruel asesinato de animales y acto de violencia contra un centro de conservación de vida silvestre”.

Agregó que los trabajadores de Ecoparc están muy asustados, temen por su vida y por la vida de los animales, y ya no quieren asistir a trabajar. Desafortunadamente aquí los animales los necesitan para subsistir y si dejan de asistir por miedo, los animales también podrían sufrir las consecuencias indirectas de las disputas entre la delincuencia organizada, indicó.

Apuntó que la violencia escaló a tal grado que la Universidad de Colima anunció la suspensión de clases presenciales y a ella se sumaron el resto de escuelas de todos los niveles. Se han cerrado varios comercios y la gente ya ni se atreve a pasear por las calles.

El presidente de la asociación, Ernesto Zazueta, hizo “un enérgico llamado al gobierno de Andrés Manuel López Obrador y al gobierno estatal a que acepten la grave situación que está atravesando Colima”. La asociación integra a más de 80 centros de conservación de vida silvestre en México.

Recordó que “hace unos meses el Centro de Conservación Croco Cun en Quintana Roo fue secuestrado por delincuentes, provocando la muerte de varios ejemplares; a principios de este mes asesinaron a Armando Coello Arroyo, dueño y director del Parque Zoológico de Querétaro Wamerú, y ahora asesinan a animales del Centro de Conservación de Colima. Aquí la cosa ya no es solo entre grupos de la delincuencia organizada, ahora en cualquier momento nos toca incluso protegiendo la vida silvestre, y también a los animales, exigimos que frenen esta violencia, y que el gobierno deje de comportarse indiferente, sordo e insensible”.