El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que su administración pretende rehabilitar más de 2 mil 500 kilómetros de vía ferroviaria para uso de transporte de pasajeros y carga, particularmente en el sureste y centro del país; y para el norte y Bajío, enfatizó, deberá hacerlo el “relevo generacional”, concepto con el que se ha referido a su futuro sucesor o sucesora.

Durante la mañanera, el mandatario federal defendió además la labor del titular del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), Javier May, instancia y funcionario encargados del desarrollo del Tren Maya.

Destacó que el ferrocarril fue fundamental en México, pues comunicó a todo el país, por lo que parte de su proyecto es recuperar ese sistema en diversas etapas.

Además del Tren Maya, que conectará por cinco entidades del sureste (Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo), el presidente dijo que busca la rehabilitación de varias vías férreas ya existentes que conectarían el Golfo con el Pacífico: de Coatzacoalcos, Veracruz, a salina Cruz, en el Istmo de Tehuantepec, Oaxaca.

“Se plantea la rehabilitación de esta línea, ya estamos rehabilitando de Coatzacoalcos a Salina Cruz, esto lo vamos a terminar este año. Ya va a haber tren de carga y pasajeros y estamos rehabilitando los puertos y vamos a desarrollar en este corredor (interoceánico) diez parques industriales, porque aquí enfrente está la costa Este de Estados Unidos, que tiene mucho potencial para el desarrollo económico y comercial. Todo el comercio a Estados Unidos lo tenemos hacia Texas y California, lo que queremos (con el corredor del Istmo) es el desarrollo de la relación con la costa Este”, apuntó el titular del Ejecutivo.

Aunado a ello, dijo que su administración piensa modernizar la vía ferroviaria que va del Istmo de Tehuantepec a Guatemala, que son alrededor de 400 kilómetros; al igual que una que iría a Dos Bocas.

En otras zonas del país, señaló que se trabaja en diversos proyectos: en Jalisco, para la comunicación de la zona conurbada de Gualdalajara; el tren Toluca-Ciudad de México –iniciado el sexenio pasado y detenido por actos de corrupción— que debe estar terminado el próximo año y cuyos trabajos se han complicado debido a que “no han quedado bien las empresas”, además que se elevó de lo presupuestado de 30 mil millones a 90 mil millones.

Uno más es un tren que conecte al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles con la zona de Lechería, estado de México, para de ahí hacer conexión con el suburbano (ya existente) y llegar a la estación Buenavista, a fin de que tome entre 40 y 45 minutos llegar a la terminal aérea.

Finalmente, apuntó el presidente, se trabaja en un proyecto de tren interurbano en Monterrey, en colaboración con el gobierno de Nuevo León.

“Y sólo nos queda pendiente de resolver el tren de la desviación en Xalapa, Veracruz. Ese es el plan que tenemos, con todo ello relacionado a ferrocarriles son en total como 2 mil 700 kilómetros de vía férrea”.

Quedarán pendientes nuevos proyectos como la conexión por ese medio de transporte de la capital del país con Querétaro, Guanajuato y San Luis Potosí; o el tren del Pacífico de Guadalajara a Baja California. “Pero ya, el relevo generacional se va a hacer cargo”, enfatizó en referencia a su posible sucesor o sucesora.