París. Todo solía resultar fácil a Dominic Thiem en la cancha: su poderoso derecha, su elegante revés, sus buenas decisiones, todo bien calibrado al punto que ganó el Abierto de Estados Unidos y disputó tres finales de Grand Slam, incluidas dos en Roland Garros.

En la actualidad, aunque ya no le duele el tendón que se desgarró el año pasado en la muñeca derecha, sus disparos y lo más desconcertante aún, sus recursos, ya no son lo que fueron. Tras su eliminación el domingo en la primera ronda del Abierto de Francia, Thiem sumó su derrota consecutiva número 10.

Tan mal es el presente del austriaco de 28 años, que tras desplomarse del tercer puesto del escalafón mundial al 194, reconoció después de su derrota por 6-3, 6-2, 6-4 ante Hugo Dellien, que tal vez sea hora de irse a jugar en un torneo Challenger, la segunda categoría del tenis, para conseguir una victoria y ganar algo de confianza.

Tras lamentar el desempeño de su derecha, su revés y un porcentaje demasiado bajo de primeros servicios, Thiem mencionó lo más importante: “A veces hago decisiones estúpidas durante el peloteo... No estoy jugando bien cuando juego… Por ejemplo, hubo un game hoy en el que cometí cuatro o cinco errores con devoluciones de derecha, y me dije ‘¿qué rayos está pasando?'”

Su prematura eliminación no fue el único acontecimiento importante en la primera jornada del segundo grande del año, disputada en un día nublado y con llovizna, que tuvo un escenario previo a la pandemia: un lleno de personas, ovaciones y sin mascarillas.

Thiem cayó ante Rafael Nadal en las finales de París en 2018 y 2019 y ante Novak Djokovic en el Abierto de Australia en 2020, y su anterior triunfo se remonta a mayo de 2021. Pero al margen de la situación por la que pasa, hubo otros resultados tal vez más sorprendentes.

El más llamativo en la rama femenina fue la derrota de la tunecina Ons Jabeur. La sexta preclasificada cayó 3-6, 7-6 (4) y 7-5 ante la polaca Magda Linette, número 56 en el ranking.

Jabeur, la primera mujer árabe que conquista un título de la WTA y la primera en alcanzar los cuartos de final en una competición de Grand Slam, reconoció: “Esperaba llegar más lejos en este torneo”.

Jabeur se presentó como líder con sus 17 victorias en arcilla esta temporada, incluido el título en el Abierto de Madrid y alcanzar la final en el Abierto de Italia.

En la categoría masculina, Felix Auger-Aliassime, clasificado número nueve evitó la sorpresa. También logró su primer triunfo en el Abierto de Francia en tres intentos y ganó un partido tras ceder los primeros dos sets.

El canadiense de 20 años remontó para eliminar 2-6, 2-6, 6-1, 6-3, 6-3 al peruano Juan Pablo Varillas, quien sorteó la fase previa para participar por primera vez en un torneo de Grand Slam.

El boliviano Dellien, 87 del mundo, tenía marca de 2-7 en partidos de Grand Slam. Pero se plantó firme en los peloteos desde el fondo de principio a fin.

“Hoy él no estuvo en su máximo nivel de antaño, pero fuera como fuera yo debía vencerlo”, declaró Dellien. “Es un paso importante en mi carrera”.

También el domingo, el argentino Diego Schwartzman (cabeza de serie número 15) se anotó su victoria 50 en un torneo de Grand Slam tras doblegar 6-3, 1-6, 6-4, 6-2 al ruso Andrey Kuznetsov.

El uruguayo Pablo Cuevas y la colombiana María Camila Osorio también salieron airosos de sus debuts. Cuevas dio la sorpresa al dejar fuera 6-2, 6-1, 6-2 al estadounidense Jenson Brooksby (31er preclasificado. Osorio despachó 6-4, 6-3 a la francesa Harmony Tan.