Un equipo de alrededor de 350 cientificos internacionales, incluidos mexicanos lograron obtener la primera imagen del agujero negro supermasivo conocido como Sagitario A* o Sgr A*, que está en el centro de nuestra galaxia, la Vía Láctea, y cuya masa es cuatro millones de veces la de nuestro Sol.
Este hecho se dio a conocer esta mañana de forma simultánea en diversos países, incluidos México.
El Gran Telescopio Milimétrico Alfonso Serrano (GTM), operado por el Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE) y apoyado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), forma parte de esta colaboración internacional, junto con otros radiotelescopios ubicados en diversas partes del planeta, explicó David Hughes, director del GTM e investigador del INAOE.
En conferencias de prensa en el Conacyt, se explicó que un equipo internacional de astrónomas y astrónomos develó la primera imagen de este agujero negro supermasivo, prácticamente inactivo.
Este hallazgo aporta “valiosas pistas sobre el funcionamiento de estos gigantes, que se presume residen en el centro de la mayoría de las galaxias”.
La imagen fue producida por un equipo de investigación global llamado Colaboración del Telescopio del Horizonte de Eventos (Event Horizon Telescope Collaboration, EHT), utilizando observaciones de una red mundial de radiotelescopios.
La imagen ofrece finalmente el aspecto real del enorme objeto que se encuentra en el centro de nuestra galaxia. Los científicos ya habían estudiado estrellas orbitando alrededor de algo invisible, compacto y muy masivo en el centro de la Vía Láctea. Estas órbitas permitían postular que este objeto, conocido como Sagitario A* o Sgr A*, es un agujero negro y la imagen publicada hoy proporciona la primera evidencia visual directa de ello.
La doctora María Elena Álvarez-Buylla Roces, directora del Conacyt aseguró que este anuncio científico es “relevante y de gran interés para la humanidad”.
Recordó que en abril 2019 se anunció al mundo “un hito histórico la captura de la primera imagen de la sombra de un hoyo negro”, ese fue el M87*, ubicado en el centro de la galaxia elíptica gigante Messier 87.
Destacó que el gobierno ha apoyado el mejoramiento GTM, instalado en la sierra de Puebla, y destacó que a través del GTM y de los expertos nacionales, la “participación de Mexico es importante”, en este hallazgo.
Hughes, señaló que estas imágenes, así como las del primer hoyo negro masivo giratorio, de 2019, confirman la teoría de la Relatividad de Albert Einstein.
“Estamos muy emocionados de compartir los nuevos resultados” y añadió en entrevista posterior que estos avances además de saciar la curiosidad humana sobre el Universo y ampliar el conocimiento de los hoyos negros, pueden traducirse en aplicaciones en otros campos, por ejemplo la resolución lograda podría incidir en una mejora de uso de imágenes, por ejemplo en medicina, con lo que se evitan procedimientos invasivos, también todo lo desarrollado podría mejorar las comunicaciones e incluso en criogenia.
Los agujeros negros no pueden verse, porque son completamente oscuro, pero si se puede lograr captar el gas resplandeciente que lo rodea.
Explicaron que debido a que el agujero negro está a unos 27 mil años luz de la Tierra, “nos parece que tiene en el cielo el mismo tamaño que tendría una dona en la Luna”.
Para obtener su imagen, el equipo del EHT creó una red de ocho radio observatorios, anteriormente construidos con otros fines, combinados para formar un único telescopio virtual del tamaño de la Tierra.
El EHT observó Sgr A* durante varias noches, recopilando datos durante muchas horas seguidas, de forma similar a como una cámara fotográfica tradicional haría una imagen con un tiempo de exposición largo.
“La participación del GTM en el EHT es importante, en parte porque el GTM es el radiotelescopio de plato único más grande del mundo, diseñado y optimizado para realizar observaciones en una longitud de onda de un milímetro”, dijo Hughes.
El doctor, Luis Alberto Zapata González, director del Instituto de Radioastronomía y Astrofísica (IRyA) de la UNAM, expuso que “durante mucho tiempo estuvimos ocupados en confirmar existencias de los hoyos negros” y destacó que “confirmamos que Einstein está correcto”.
Sostuvo que a diferencia del otro hoyo negro identificado en 2019, el de nuestra galaxia presenta una gran variabilidad del gas caliente en torno al agujero negro. “Esto nos dice que cambia en minutos”, por eso tardaron cinco años en lograr la imagen de agujero negro de la Vía Láctea. Y es que ya desde las observaciones de 2017 había indicios de su existencia.