Ciudad de México. Para contrarrestar el fenómeno migratorio, México seguirá planteando a Estados Unidos la inversión en Centroamérica en lugar del cierre de las fronteras.
“No es sólo sellando las fronteras, con medidas coercitivas, no, eso no es posible. Hay que atender las causas. Es lo que estamos planteando. Cada vez hay más aceptación, los estamos convenciendo de que se atienda así el fenómeno migratorio. Hay muy buenas relaciones con el gobierno de Estados Unidos”, planteó esta mañana el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Al hablar, una vez más, de los temas que tocó con su homólogo estadunidense, Joe Biden, durante la conversación telefónica que sostuvieron el viernes pasado, aseveró que no hablaron del conflicto entre Rusia y Ucrania, pero sí se profundizó sobre todo en migración y en las formas de hacer frente para reducir los flujos.
Washington prevé un alza en los flujos irregulares ante el posible levantamiento del Título 42, con el que deportaba a migrantes por motivos de sanidad sin darles derecho a solicitar asilo.
“Hablamos de los programas para el desarrollo en Centroamérica. El asunto migratorio, cómo nosotros y también el presidente Biden está cada vez más convencido de que hay que atender las causas, que hay que producir, generar empleos en los países de Centroamérica”, dijo López Obrador a pregunta expresa sobre la llamada el viernes de la semana pasada.
El mandatario mexicano expresó al estadunidense la necesidad de invertir mucho más en América Central y recordó que desde la administración del ex presidente Doland Trump se acordó que se iban a destinar 4 mil millones de dólares en un plan para apoyar a las naciones centroamericanas a fin de mantener a la gente en sus pueblos y no se vieran en la necesidad de emigrar. “Pero hasta ahora no se ha invertido prácticamente nada”, lamentó.
“Todavía no hay inversión suficiente. Nosotros estamos invirtiendo en Centroamérica, en la medida de nuestras posibilidades, se están aplicando programas como el Sembrando vida en El Salvador y en Honduras; y Jóvenes construyendo futuro. En El Salvador son 10 mil productores que están recibiendo apoyo del gobierno de México para mantenerlos trabajando en sus pueblos y que esto no los obligue a migrar”.
Y esa será, dijo, la línea medular en la visita que realizará por Centroamérica esta semana. “Hemos hecho una evaluación de esta pequeña inversión, el efecto que tiene, de cómo sí hay muy buenos resultados y estamos convenciendo al gobierno de Estados Unidos que con prontitud invierta”.
Detalló que a diferencia de los apoyos directos que entrega su administración, la Casa Blanca tienen un enfoque diferente. “Piensan que basta con promover la inversión privada, que si se instalan plantas, fábricas en los países de Centroamérica se va a generar empleos y así se va a conseguir el propósito de que la gente trabaje en sus lugares de origen. Eso es bueno, pero eso lleva tiempo”.
Otro punto que México plantea es el incremento de visas temporales de trabajo para ciudadanos de Guatemala, Honduras y El Salvador, en particular porque Estados Unidos no tiene fuerza de trabajo, pero a la vez tiene una política migratoria que no permite que se obtenga esa mano de obra. “Es una paradoja”.
Eso, enfatizó el presidente, fue parte de lo que el canciller Marcelo Ebrard negoció ayer con funcionarios de Estados Unidos, en particular con el secretario de Estado, Antony Blinken.
Desde la perspectiva de López Obrador, con estas dos estrategias se podría atemperar el fenómeno migratorio.