Ciudad de México. La Oficina en México del Alto Comisionado para los Derechos Humanos (ONU-DH) lamentó “profundamente” el fallecimiento de la luchadora social Rosario Ibarra de Piedra. Mujer que abrió en el país “cauces en favor de la libertad y los derechos humanos, la inclusión de las mujeres, la democratización y la exigencia de erradicar la desaparición forzada y otros abusos de poder”, aseveró.
GALERÍA: Rosario Ibarra de Piedra, una mujer indoblegable que peleaba sin odio
A través de redes sociales, expuso que el legado de la fundadora del Comité Eureka, quien falleció hoy a los 95 años de edad en Nuevo León, “perdurará por siempre en el ánimo de quienes exigen justicia, verdad y aparición con vida de sus seres queridos”.
Su lucha “se mantiene vigente en el México de hoy, con cerca de cien mil personas desaparecidas. Su semilla dará flor hasta encontrarles”, manifestó.
De igual manera, la ONU-DH trasladó sus más sentidas condolencias a familiares, amistades y a todas las personas que enfrentan la desaparición de un ser querido.